Como "extraordinarios", calificaba el comisario jefe de Zamora los resultados de 2018 en cuanto al índice de delitos que ha descendido y se sitúa en 26 por cada 1.000 habitantes, y a la tasa de criminalidad reducida también hasta colocarse en poco más allá del 28%, apuntó ayer Ubaldo de la Torre minutos antes de iniciarse los actos del 195 aniversario de la creación de la Policía Nacional.
El máximo responsable de la Comisaría de Zamora aseguró, tras cifrar en 445 el número de detenidos a lo largo del ejercicio pasado, que los delitos que causan alarma social están controlados en la capital , si bien admitía que ha habido "un pico" en el robo de viviendas que tratan de reconducir con mayor presencia policial en la calle.
El comisario insistía en que la delincuencia "está bajando" en la capital, para lo que puso sobre la mesa cifras: "si hace siete años se registraban 2.055 infracciones penales (delitos), ahora son unas 1.760". De modo que, "Zamora es segura", hacía hincapié el subdelegado en Zamora del Gobierno central del PSOE, Ángel Blanco, quien ensalzó durante el acto oficial, la " eficiencia y cercanía" al ciudadano de la Policía Nacional, cualidades que han permitido una alta tasa de esclarecimiento de delitos.
El balance de 2018 deja constancia de los logros de este Cuerpo de Seguridad del Estado, cuyos efectivos han conseguido decomisar de 41 kilogramos de drogas de todo tipo; desarticular 20 puntos de venta de droga en la capital y llevar a cabo 496 incautaciones de estupefacientes. Las distintas intervenciones policiales permitieron localizar y requisar 98 armas de diferentes tipos, mientras que los agentes prestaron 150 servicios humanitarios de enero a diciembre de 2018.
La delincuencia organizada, la trata de seres humanos para la explotación y los delitos ligados a Nuevas Tecnologías y el terrorismo internacional, el yihadista, siguen siendo "la máxima prioridad para asegurar un entorno libre y seguro al ciudadano", sobre la que pivota la acción de la Policía Nacional. Precisamente, el ciberespacio concentra buena parte de la delincuencia común y especializada, lo que ha obligado a ajustes en la Policía Nacional para combatirla, manifestó De la Torre.
El subdelegado profundizó en la función primordial de la Policía Nacional, para fortalecer la seguridad de los ciudadanos, lo que incide en que la capital sea un lugar atractivo para que se asiente población y contribuye al crecimiento. Ángel Blanco destacó la dedicación de los agentes, su "pericia, seriedad, honradez y eficacia" que explican los grandes resultados obtenidos en el último año, aún "con los escasos medios", reconocía.
La protección a los sectores más sensibles de la población, a los niños, a los mayores y a las mujeres maltratadas es otra de las prioridades de los agentes, en las que el comisario destacó la colaboración con instituciones como Junta de Castilla y León, el Ayuntamiento de Zamora o con Diputación Provincial encargados de tutelar o amparar a esas personas.
Blanco y De la Torre apelaron a la colaboración ciudadana, "fundamental" para atajar la delincuencia, por lo que instan a los zamoranos a acudir a la Comisaría o utilizar las plataformas de la Policía Nacional en redes sociales, con absoluta garantía de confidencialidad, para denunciar cualquier delito o "abuso a colectivos vulnerables". Precisamente, esas herramientas "han multiplicado las denuncias anónimas y han facilitado la interacción", apuntaba el comisario.
