Los padres del colegio Riomanzanas -cuyos alumnos volvían a sufrir ayer por segundo día consecutivo las consecuencias de falta de calefacción en el centro por problemas en el sistema- han logrado arrancar un compromiso tanto de la Junta como del Ayuntamiento de la capital, responsables de la instalación y del mantenimiento, respectivamente, para ofrecer una solución a un problema que, según el ampa, se lleva arrastrando desde el pasado mes de noviembre.

El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, y el director provincial de Educación, Fernando Prada, recibieron ayer a una representación del ampa del centro para conocer la situación de la calefacción en el colegio. "Ambos nos han ofrecido muy buenas palabras, esperemos que ahora puedan dar una solución rápida para solucionar un problema que afecta a 250 niños", apuntó el portavoz del ampa, Marcos González, tras las reuniones.

Desde el Ayuntamiento se elaborará un informe para conocer en qué condiciones se encuentra la instalación para poner una solución sobre la mesa. Si el problema va más allá de un mantenimiento y limpieza, afectando directamente a la propia infraestructura, la Dirección Provincial de Educación se encargará, si es necesario, de correr con los gastos de instalar una nueva caldera.