Una instalación escultórica de Alaiz-Miguélez en la que, junto a sombras y proyecciones estratégicamente colocadas, se forma una escenografía de planos visuales fragmentados en los que interactúa la danza de Eva Peña y la música en directo del clarinete de Cecilia Serrano ocupa desde ayer la sala de exposiciones de La Alhóndiga.

Las seis piezas escultóricas, realizadas en 2014, tienen la peculiaridad de estar efectuadas con aperos de labranza, mezclados y transformados. "Son objetos muy estéticos y sugerentes y pensé en utilizarlos por mi fuerte vinculación con el campo y mi deseo de reflexionar sobre el futuro del medio rural y su permanencia en el tiempo", explica la artista Laura Alaiz. Este anclaje en el tiempo de las obras contrasta con las sombras y proyecciones de fotografías de paisajes y con el baile y el sonido que conducen por "la experiencia de la pérdida y la deriva a la que se ve sometida la situación del mundo rural", describen desde la asociación cultural Luna Lunares Danza, impulsora de la nueva actividad.

La propuesta artística "Tiempo de espera" se abrió con una actuación en directo donde la bailarina Eva Peña danzó los temas "Rapsodia para clarinete solo", de Giacomo Miluccio, y "Cantinele", de Louis Cahuzac, que Cecilia Serrano interpretó en directo con su clarinete ante las creaciones de Alaiz-Miguélez. Nuevamente las artistas actuarán en directo el próximo jueves a las 20.30 horas antes de la clausura, al día siguiente, de la muestra.