El famoso roscón de la pastelería Conrado, de La Bañeza, uno de los más solicitados por el suculento premio que guarda, ha recaído este año en una familia zamorana, que el pasado viernes recibía el dulce, que no probaron hasta la tarde del día de Reyes.

Ana Belén Corrales Corrales fue la encargada de comprar el roscón este año, puesto que le había tocado el haba en las pasadas navidades, y su marido José Luis Gato Morales cortó la porción en la que venía el cheque de 10.000 euros, que irán a canjear esta misma semana a La Bañeza.

El premio se repartirá entre los cuñados y suegros de José Luis Gato. En la casa de estos últimos, ubicada en Morales del Vino, fue donde merendaron ayer el roscón y decidieron compartir esa suerte entre toda la familia.