Las sonrisas y los abrazos fuero continuas, con mayor intensidad al iniciarse la jornada de convivencia que recuerda los quince días pasados juntos, en un paraje inolvidable, tan distinto al urbano en el que desarrollan su vida a lo largo casi los doce meses del año. Sejas de Sanabria, el paisaje que les permite adentrarse en mil aventuras y disfrutar durante quince días en julio o en agosto, según el turno, volvió ayer a dar contenido a las conversaciones de los adolescentes que vuelan libres de las ataduras paternas y maternas durante el campamento organizado por la Asociación Familiar San Lorenzo.

Sejas de Sanabria permanece intacta en la memoria de estos niños y niñas, algunos ya adolescentes, que reservan cada año quince días de verano para, tutelados por el párroco de Alviar y Siglo XXI, Paco Díez García, y llevados por varios monitores, asilvestrarse en un ambiente de camaradería que retienen en su retina aunque pasen los años. "Después de estas experiencias, quieren reengancharse a los campamentos", para los que se abrirá el plazo de inscripción en enero y se cerrará en febrero.

De los 220 participantes del año pasado, 45 acudieron ayer a la jornada de convivencia desarrollada por la mañana en las pistas de pádel situadas en una instalación de la carretera de Villalpando; y ya por la tarde, en el polideportivo del CEI. El deporte ha estado presente en ambas citas y los ganadores se han llevado medallas. Han comido todos juntos en la parroquia de la Natividad y por la tarde han tenido su tiempo para bailar.

Paco Díez destaca el entusiasmo y la alegría del reencuentro, en lo que denomina "el compás de espera" hasta la próxima cita de verano que les permitirá volver a compartir cientos de experiencias imborrables. Muchas de esos momentos volvieron ayer a primer plano gracias a los vídeos proyectados por la Asociación, imágenes que recogen las actividades y talleres que se hacen durante los dos turnos de los campamentos.

Cumplidos los 14 años, el sueño se termina. La única forma de regresar a los campamentos es como monitor de ocio y tiempo libre, "muchos hacen cursos", indica Paco Díez, quien avanza que "este año intentaremos impartir uno en la parroquia, la parte práctica se puede hacer en el campamento de Sejas". Tras el campamento de agosto, se hará un turno de una semana con adolescentes, "pensando en los futuros monitores"