La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Castilla y León ha reclamado una reestructuración progresiva de aquellos puestos con menos de diez guardias civiles por etapas, así como el establecimiento de dos tipos de unidades territoriales. De esta manera, quedaría una unidad básica con puestos ordinarios y una plantilla mínima de treinta agentes, y otra con los puestos principales con una plantilla que esté en función de la localidad donde se ubique, pero con un mínimo de sesenta efectivos. Con esta reestructuración, la Asociación Unificada de Guardias Civiles considera que se podría abordar de una manera efectiva la problemática de contar con plantillas "totalmente ineficaces e inútiles" por tener que cubrir una sola patrulla hasta tres o seis cuarteles en función de las necesidades. Unos extremos que se dan, principalmente, en los periodos vacacionales, cuando las plantillas se reducen al mínimo tanto en la provincia de Zamora como en el conjunto de la región.