En lo que va de año, tan solo una familia se ha apuntado al programa de acogimiento familiar que desde hace 28 años desarrolla la Junta de Castilla y León en colaboración con Cruz Roja y el Ayuntamiento de Zamora.

Conforme a los datos facilitados ayer por el presidente de la organización humanitaria, José Manuel del Barrio, durante 2018 se efectuaron 11 acogimientos gracias a las 38 familias que en total participan en el programa, que cuenta con 51 menores. Unas cifras que evidencian la necesidad de una mayor implicación de la sociedad zamorana para proporcionar un entorno familiar estable a los pequeños en situación de desamparo como consecuencia de distintas contextos de sus progenitores.

La medida del Sistema de Protección a la Infancia contempla una alternativa de convivencia temporal -diferente a la adopción- en la cual los menores recalan en los hogares que les abren sus puertas "para ser tratados como un miembro más de la familia", en palabras del gerente territorial de Servicios Sociales, Eutimio Contra.

Tras un proceso de valoración, pueden ser acogedoras tanto las personas "ajenas" que no guardan ninguna relación con la biológica como las "extensas", aquellas que sí tienen cierto parentesco con la de origen. En la actualidad, urge la acogida para cuatro menores de la provincia. Por eso, a fin de proporcionar un entorno lo más "normalizado" posible para ellos, la Junta, el Ayuntamiento y Cruz Roja apelan a la solidaridad de los ciudadanos a través de una nueva campaña de promoción de este programa de acogimiento con la instalación de un colorido vinilo de grandes dimensiones en el antiguo edificio de García Casado.