El Seat León de color amarillo sustraído durante la madrugada del lunes -cuando se encontraba aparcado en la céntrica avenida de Portugal de Zamora capital- fue hallado ayer en Salamanca prácticamente calcinado.

El vehículo había sido abandonado en una carretera próxima al municipio charro de Alba de Tormes y, según las primeras hipótesis, los ladrones podrían haberlo utilizado para cometer un atraco en una empresa asentada en una localidad cercana antes de incendiarlo.