El evento eWoman Zamora mostrará mañana experiencias de mujeres de éxito en el entorno profesional y tecnológico. La presidenta de la Diputación Provincial, Mayte Martín Pozo, considera que es una buena iniciativa porque pone de manifiesto el éxito, los logros y el trabajo de las mujeres. Organizado por LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA y Prensa Ibérica, el evento cuenta con el patrocinio de la Diputación de Zamora, CaixaBank, el Ayuntamiento de Zamora, MMT Seguros y Aquona y la colaboración de Joyería Jolfer, Carmen Rebollo Estilistas y el Consejo Consultivo de Castilla y León.

-¿Qué le parece la jornada eWoman Zamora que se celebra mañana?

-Me parece una iniciativa buena. Todas las iniciativas que sirvan para poner de manifiesto el éxito, los logros conseguidos por mujeres o el trabajo de las mujeres siempre son importantes. Con eventos como este, se hace una labor de sensibilización muy grande.

-¿Cree que es positivo que se visibilicen casos de mujeres de éxito?

-Sí, porque cuando una mujer ve que otra mujer lo ha conseguido pese a las dificultades que entraña, piensa que ella también puede hacerlo, que puede animarse a emprender o tener una carrera profesional brillante. Igual que en otros temas negativos está el efecto llamada, creo que en esto también lo hay.

-Es una de las cinco mujeres presidentas de diputación que hay en toda España, ¿la mujer está cada vez más presente en todos los ámbitos o todavía queda por hacer?

-Afortunadamente la mujer cada vez está más presente. De todos los presidentes de las diputaciones provinciales que hay en España solamente cinco somos mujeres y dos estamos en Castilla y León, lo que no es un mal porcentaje. Todavía queda mucho por hacer, pero creo que en política no es tanta la dificultad en el acceso como en la permanencia. En el acceso de la mujer a la política, por lo menos en el partido en el que yo milito, nunca ha sido un obstáculo el ser mujer. A mí nunca me han negado nada por el hecho de ser mujer, tampoco te regalan nada. No soy partidaria de cuotas, soy partidaria de igualdad de oportunidades, pero creo que la dificultad de la mujer en política no está tanto en el acceso, sino en la permanencia porque conlleva muchas horas, mucha dedicación y ahí entran otros problemas como la conciliación. Todavía queda por hacer para que la presencia de la mujer sea mayor porque aún hay muchas profesiones o algunos grandes puestos en los que las mujeres tienen una representación ínfima.

-¿Qué medidas se impulsan desde la Diputación en apoyo a la igualdad?

-Desde el punto de vista interno, tenemos un plan de igualdad que aplicamos a todos los empleados públicos de la Diputación. Dentro del trabajo que se hace en la provincia, se encuentran todas las medidas que desarrollamos desde el área de Servicios Sociales. Consiste en todo el trabajo que se hace en los talleres educando en igualdad y las actividades que realizamos con asociaciones de mujeres y con muchas asociaciones culturales que son de mujeres porque fundamentalmente son las que más se mueven. También trabajamos en medidas en las áreas de desarrollo económico, de emprendimiento y de formación. Todo eso siempre se intenta hacer en igualdad, pero no con una cuota, sino con una discriminación positiva que hemos implementado, por ejemplo, en las ayudas para el pequeño comercio rural, donde hay una discriminación positiva por el esfuerzo que supone para una mujer establecer su pequeño negocio en el medio rural. Además, hemos contratado a un agente de igualdad para que, después del diagnóstico que haga de aquellas deficiencias que se vean en la provincia, poder trabajar y poder decidir sobre ellas.

-¿Qué supone la presencia de la mujer en el medio rural?

-Es todo. La mujer es la base del mundo rural, es la que sujeta el mundo rural. Desde tiempo atrás, siempre ha sido la mujer la que se encargaba prácticamente de todo, también de las tareas en el campo muchas veces. Las mujeres son las que sujetan el medio rural. Mientras una mujer se mantiene en el medio rural, se mantiene la familia allí. Si la mujer se desplaza a un núcleo urbano, detrás de la mujer se va el hombre. Siempre les digo a las mujeres que son el pilar sobre el que se fundamenta la permanencia de población en el medio rural.

-¿Cómo se apoya a las mujeres desde la Diputación para que vivan en los pueblos?

-El año pasado incrementamos las ayudas a la natalidad y este año hemos vuelto a incrementarlas como un apoyo más, sobre todo, en los municipios de menos de 1.000 habitantes, que quizá son los que más lo necesiten. Intentamos apoyar a la mujer manteniendo todos los servicios, poniendo en marcha otros nuevos y teniendo buenas infraestructuras y buenas carreteras. También mantenemos, que creo que es fundamental, guarderías para menos de 15 niños, las aulas de apoyo al estudio y todos los talleres que realizamos para los niños en el verano. Llevando todos estos recursos y servicios intentamos que no se demonice el medio rural para que la población pueda seguir manteniéndose e incluso asentándose más.

-¿En general cómo trabaja la Diputación para luchar contra la despoblación?

-Estamos intentando mantener todos los servicios, hacer los pueblos atractivos y que una persona que decida vivir en un pueblo no esté en inferioridad de condiciones respecto a otra que vive en un núcleo urbano o un pueblo más grande. Queremos que pueda desarrollar su proyecto de vida en el medio rural y tratamos de fomentar el empleo, el emprendimiento y el autoempleo. También seguimos trabajando y facilitando la implantación de empresas en el medio rural. Obviamente la despoblación es un problema que no puede atajar la Diputación sola. Tiene que haber un concurso de todas las administraciones, sobre todo, de las administraciones más grandes y vamos a ver si con los fondos contra la despoblación se pueden hacer algunos proyectos interesantes.

-¿Qué se puede hacer para conseguir la igualdad real?

-Trabajar mucho y educar e incidir en los más pequeños. Los niños tienen que ver la igualdad como algo inherente y que se puede conseguir. Hay que predicarles con el ejemplo en casa y apoyar a los docentes y a los CEAS cuando realizan talleres de igualdad. Es necesario trabajar con los más pequeños y con la juventud. Creo que el buen camino es educar mucho y mantener una política uniforme de todas las administraciones en materia de igualdad.

-¿Y para acabar con la violencia de género?

-Para eliminar esta lacra se necesita educación, la unidad de todas las administraciones y, desde luego, tolerancia cero hacia los maltratadores. También una respuesta contundente desde el punto de vista legal y judicial, que creo que sí que la hay. Considero que es un problema de educación fundamentalmente y hay que trabajar la igualdad para eliminar la violencia de género.