El barítono zamorano Luis Santana ha presentado una denuncia contra un empleado ferroviario que la emprendió a voces en pleno andén de Chamartín tras un incidente motivado por el perro de compañía del viajero, una chihuahua toy de nombre "Putina" de apenas un kilo de peso.

El cantante informó en el control de acceso que llevaba con él a su perra. Estaba convencido de que el animal podía viajar con él en clase preferente, y así es, según las condiciones de Renfe, pero siempre que abone el billete y no ocupe plaza.

"El empleado de la estación me dijo que tenía que hablar con el revisor si quería meter al perro en el tren", en un tono de enfado que ya empezó a extrañar a Santana, quien le trataba de explicar que él pensaba que podía viajar con el perro, pero desconocía que tenía que adquirir un billete a mayores. No contento con la admonición el empleado indicó a Santana que no podía permanecer en el lugar donde se encontraba, a lo que el cantante replicó que no se encontraba bien, que tenía, fiebre, había estado vomitando, y estaba esperando a dar con el revisor para solucionar el problema con el viaje con el can.

Santana advierte al empleado que piensa presentar una queja por el trato recibido, a lo que "palabras textuales, me contesta, payaso, como me denuncies no montas al tren, porque soy la máxima autoridad".

Al final apareció el revisor, que dejó subir al barítono al convoy con rumbo a Zamora y no le puso problemas para que llevara a su mascota, pero el mal rato que se llevó Santana hace ver las dificultades que puede entrañar viajar con animales de compañía.

Y eso que Renfe dispone de una página web en la que explica bien clarito que "el transporte en trenes AVE, Larga Distancia, Avant, Media Distancia Convencional, Cercanías y Feve se limitará a pequeños animales de compañía, entendiendo como tales, perros, gatos, hurones y aves no de corral".

Serán tolerados para su transporte, indica "si no se opone el resto de clientes ni producen molestias a los mismos y estarán siempre bajo control de sus dueños en todas las fases del viaje. En caso contrario, el personal de a bordo buscará la alternativa más favorable para poder continuar el viaje en otro lugar del tren y si no es posible se le ofrecerá al cliente la posibilidad de viajar en otro tren o el reintegro de su billete".

El animal deberá cumplir las condiciones higiénico-sanitarias y de seguridad, y disponer de la documentación conforme a la legislación vigente. En algunos casos, "se podrá limitar el transporte de animales de compañía".

Los perros guía y de asistencia, podrán viajar gratuitamente acompañando a sus dueños, debidamente identificados, mientras que el resto deberán abonar el importe del billete sin ocupar plaza.

Se admitirá como máximo un animal por viajero, y "durante el viaje deberá situarse en un lugar discreto a los pies del dueño de tal forma que interfiera lo menos posible al resto de los clientes, debiendo estar sujetos permanentemente por sus portadores".