La ciudad de Zamora recuperará el antiguo puente del ferrocarril como pasarela peatonal. El Ayuntamiento y Adif, propietaria de la infraestructura, han acordado la cesión del viaducto para uso municipal por un periodo de 75 años bajo la declaración de Vía Verde, lo que también abre la puerta a la ciclabilidad del recorrido que separa ambas márgenes del río Duero. El convenio incluirá, previsiblemente, la restauración y adaptación de este gigante metálico para su nuevo cometido, una obra que se podría ejecutar con cargo a los fondos de conservación del Ministerio de Fomento. Todo ello se dispondrá en un documento que se firmará, confían en la Casa de las Panaderas, de manera "inmediata".

El acuerdo entre el Ayuntamiento de Zamora y Adif permitirá a la ciudad recuperar el quinto puente sobre el río Duero, infrautilizado desde el año 1986 tras el cierre de la línea Plasencia-Astorga a la que daba servicio. Así lo ha confirmado el teniente de alcalde, Antidio Fagúndez, quien se ha encargado de negociar esta cesión con la presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera. "Se trata de un convenio de cesión que nos permitirá atender una demanda histórica para comunicar los barrios de ambas márgenes de la ciudad, además de ampliar el carril bici y ofrecer una nueva vía para los peatones", ha señalado el edil socialista.

El citado convenio, aún pendiente de firma, otorgará a Zamora la posibilidad de disponer del puente en régimen de cesión durante los próximos 75 años. No obstante, Adif mantendrá la propiedad del viaducto contemplando una poco posible reapertura de la antigua línea Plasencia-Astorga tras los pertinentes estudios del Ministerio de Fomento.

Será precisamente este último departamento gubernamental quien deberá hacer frente a las obras de restauración del puente, como así se está negociando entre ambas instituciones. Unos trabajos que habrán de regirse por las directrices de conservación marcadas en el Plan General de Ordenación Urbana de Zamora, al tratarse de un edificio recogido en el Catálogo Arquitectónico y estar protegido. Según este documento, las obligaciones en este caso particular se extienden a la conservación de la tipología estructural y los elementos originales y de valor histórico-artístico.

El puente del ferrocarril que ahora se pretende reabrir al tránsito peatonal data del año 1933 y permanece clausurado desde el 1986, cuando definitivamente se cesó la actividad de la línea a la que daba servicio. Consta de una longitud total de 254 metros y una anchura del tablero de 5,9 metros. Según los documentos del PGOU, su estado actual de conservación es "normal" pese a permanecer sin servicio durante tantos años. Se trata de uno de los cinco puentes que actualmente cruzan el río Duero a su paso por Zamora y comunica ambas márgenes entre el entorno de la Ciudad Deportiva y la carretera de Villaralbo, junto a las aceñas de Pinilla.