Aún con la resaca que ha dejado en la ciudad la recreación de la batalla de Stalingrado, Zamora se prepara para otro fin de semana dedicado a la historia. La asombrosa victoria del Tercio de Zamora contra los holandeses en 1585 tendrá su recreación en una de las islas del Duero a su paso por la capital.

Este acto servirá de homenaje y recuerdo al Tercio Viejo de Zamora, también conocido como Tercio Bobadilla por el nombre de su primer Maestre de Campo. El Tercio, creado oficialmente el 30 de abril de 1580, logró integrar a tres mil zamoranos entre sus filas. Esta tropa protagonizó una batalla que ha pasado a la historia envuelta en el misterio de un milagro. Exhaustos y con la derrota casi asegurada, los soldados del Tercio de Zamora sorprendieron a sus sitiadores dándole la vuelta al enfrentamiento.

Un Tercio muy zamorano

El Tercio Bobadilla llevaba como bandera la Seña Bermeja y en sus uniformes un escudo de Zamora con el brazo armado de Viriato y el Puente de Mérida. Una historia poco conocida por los zamoranos. Por eso la recreación del ataque al islote de Bommel tendrá lugar durante el puente festivo de principios de diciembre.

El momento álgido será en la tarde del 7 de diciembre con la conmemoración del Milagro de Empel. Una pequeña flota de embarcaciones "holandesas" avanzará al son del repique de las campanas de todas las parroquias de Zamora, con sus cofradías y con la inestimable ayuda del Ministerio de Defensa, que tiene previsto desplazar una compañía del batallón Zamora de la Brilat para realizar una ofrenda.

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