Desde muy niña supo que lo suyo su pasión era la costura. Con tan solo siete años comenzó a formarse en confección y en pintura y con 15 años empieza a crear sus propios vestidos. Tras combinar Bachillerato con el módulo de patronaje y diseño de moda en la Escuela de moda Canovas del Castillo de Valladolid, estudió en Roma la carrera de alta costura en L´Accademia Internazionale d´ Alta Moda e d´Arte del Costume Koefia, donde trabaja grandes estilistas de alta costura italiana.

Deseosa de nuevas experiencias la joven nacida en Valladolid de madre de Carbajales de Alba y que pasa gran parte de su tiempo ahora en Zamora, se traslada a Barcelona para conocer el arte de la sastrería masculina y seguir con sus proyectos de moda para mujer realizando dos másteres de Patronaje y Escalado Industrial de Mujer y de Hombre en la Escuela Superior de Diseño y Moda Felicidad Duce e inaugura su firma Ainhoa Salcedo Couture en un pequeño taller con mucho éxito.

Tras este bagaje, en 2010 la creadora establece su sede de Alta Costura Ainhoa Salcedo Couture en Valladolid continuando sus creaciones, colecciones y pasarelas. Seis años más tarde abre una "tienda con calidad altas a bajos precios. Yo tengo muchas marcas de otros proveedores y los míos propios y hacemos modificaciones en cualquier de los vestidos porque tenemos taller propio, de tal forma que la novia sale exclusiva por un precio económico", describe. "Lo hice porque me tiraba la familia y Zamora, donde firmas como Zara se instaron antes que en Valladolid, siempre ha sido pionera en moda" atestigua.

La diseñadora de moda que cree que el sector nupcial "está obsoleto" ha recibido en la última edición de la Pasarela de Burgos el premio por su innovadora idea de negocio. "Voy a vender los vestidos por debajo de la media de los demás en una serie de tiendas", explica al tiempo que relata: "He empezado con la crisis y estudiando el mercado y lo que demanda una novia, he visto que el vestido tiene un coste mínimo y por lo que he apostado es por bajar nuestros costes para que la novia pueda disponer de un vestido acorde a lo que se quiere gastar". La novia, por su experiencia, "se mueve hasta 200 kilómetros para comprarse el vestido pues hemos comprobado que a la tienda de Zamora se acerca novias de Salamanca, de León, de Portugal e incluso de Extremadura porque saben que se van a ahorrar dinero". Además para abaratar costes la joven situa sus tiendas "fuera del centro porque los locales con rentas más baratas".

Para conseguir el premio que consiste en 8.000 euros y el compromiso de amplie el negocio en dos años Ainhoa Salcedo Marbán ha tenido que presentar su proyecto de empresa y un vídeo de dos minutos de duración en el que explique su planteamiento. Posteriormente los finalistas se enfrentaron a una entrevista personal con un jurado integrado por personas de banca, la diseñadora Fely Campo. .. "más de una docena de personas que te rebatían tu idea de negocio y tu pasión", describe la modista cuyo plantamiento de negocio pasa por abrir un mínimo de cinco tiendas que disten "unos 200 kilómetros una de otras para abarca el máximo territorio nacional. La siguiente o bien Vigo o bien Oporto primero queremos asentarnos en la zona centro-norte de la Península para posteriormente, en unos tres años, abrir una fábrica propia industrial",concreta. "Dejaría de recurrir a la mayoría de proveedores y ese dinero lo invertiría en mi propia fábrica industrial para hacer nuestras colecciones nosotros y vender nosotros en otras tiendas y tener nuestra propia marca Ainhoa Salcedo Courte. La idea final es tener el Zara de las novias, para que las novias puedan llevarse un vestido por unos 400 euros en unos quince días. Es algo muy novedoso porque el sector esta anticuado y por lo que cierran muchas es que se niegan a bajar sus precios" sentencia la emprendedora que habla con pasión de su proyecto al que califica de "ambicioso pero o lo hago ahora o no lo hago" comenta entre risas.

Para Ainhoa Salcedo Marbán, quien años atrás logró el Dedal de Oro, este reconcomiendo supone para esta joven emprendedora supone "el primer reconocimiento significativo en diez años de trabajo en momentos muy duros. Por fin en mi región se me dice que lo que quiero hacer es un buen proyecto. Es un apoyo importante para seguir adelante porque durante diez años todo lo que he generado lo he reinvertido en mi proyecto que ya tiene con tres tiendas y una infraestructura".