Aunque encaran la problemática vecinal desde perspectivas diferentes, Artemio Pérez, presidente de Faveza, y Venancio Santos, de la AVZ, coinciden en varios temas de fondo. El principal, que las asociaciones de los barrios "desaparecerán" con su generación. "Nos ningunean y esto se acaba y se agota", afirman. Esta es la idea que transmitieron este miércoles en el espacio 'Ideas x Zamora', organizado por LA OPINIÓN-EL CORREO.

La salida de Christoph Strieder de la Concejalía de Barrios abrió una puerta a su esperanza hace ahora un año, pero la labor de Laura Rivera tampoco les convence: "En San Frontis seguimos igual. La concejala estuvo hace cosa de ocho o nueve meses viendo los problemas que había, pero no los ha solucionado", lamenta Venancio Santos, que alude a situaciones como la falta de contenedores o la problemática con el alumbrado en algunas calles.

Tampoco le convence esta gestión a Pérez, que insiste en que los barrios están "abandonados". "El asfaltado está bien, pero se están arreglando calles que no eran necesarias y no se nos escucha", advierte el presidente de Pinilla, que espera hoy a Laura Rivera sobre el terreno: "Nos va a decir que el puente se va a ensanchar después de no sé cuántos años y me parece bandera, pero enseña también lo que no haces", apunta.

En cuanto al sentido de las asociaciones vecinales, ya fuera de la relación con las instituciones, Artemio Pérez es franco: "Lo que pasa es que tenemos una vocación de tontos que no hay quien nos la quite. Nuestra idea siempre es arreglar y potenciar el barrio. Y también ayudar a los vecinos", explica el responsable de Pinilla.

Tampoco es muy boyante la actividad comercial en las zonas periféricas de la ciudad: "Si da pena ver San Torcuato, ¿quién va a invertir en un barrio?", se pregunta Venancio Santos, que critica que "lo poco que hay en Zamora nos lo estamos cargando entre todos". Artemio Pérez considera que los comerciantes de barrio "aguantan porque son autónomos" y pone sobre la mesa un problema infinito en la ciudad: el asunto de las licencias: "O abres ilegal o no abres y no hay ayuda ninguna. Solo te queda hacer eso o esperar meses y meses", afirma.

Finalmente, Pérez recuerda la lucha de más de una década de Pinilla para conseguir un centro médico o un centro de día en la calle Cañizal, mientras que Santos alude a la falta de autobuses matutinos para que los vecinos de su zona acudan a consulta. Solo dos ejemplos de lo que ambos consideran una batalla perdida, pero por la que no dejan de luchar.