Agentes de la Policía Nacional investigan a un individuo por una presunta infracción de simulación de delito al denunciar haber sido víctima de un robo con violencia en una zona céntrica de la ciudad sustrayéndole un Smartphone valorado en 800 euros.

Tras varias semanas de investigación en detrimento de otras denuncias que sí eran reales y tras filtrar la denuncia a través de la aplicación informática VeriPol, los agentes de la Comisaría de Policía Nacional de Zamora adscritos a la brigada de policía judicial detectaron que el objetivo de la denuncia era cobrar el importe del seguro por el robo del mismo, cuando en realidad el teléfono había sido extraviado.

La falsa víctima tenía contratado un seguro que cubría el robo pero no la pérdida ni los hurtos, por lo que decidió denunciar unos hechos falsos para justificar ante el seguro que reunía los requisitos necesarios para poder cobrar la respectiva indemnización, obteniendo de esta forma un beneficio económico ilícito.

El propio denunciante, ante las pruebas que le son presentadas, reconoce la falsedad de la denuncia incurriendo en los delitos de simulación de delito en posible concurso con un delito de estafa a la compañía de seguros.

Doble objetivo de VeriPol

La puesta en marcha de VeriPol en la Policía Nacional tiene un doble objetivo. Por un lado, tiene como misión desalentar a los ciudadanos de presentar denuncias falsas y por lo tanto, prevenir la comisión de delitos. Por otro, pretende evitar el uso innecesario de recursos policiales, optimizando así el esfuerzo y el tiempo en otras tareas.

Presentar una denuncia falsa tiene consecuencias tanto para el individuo como para el sistema policial. De hecho, se considera un delito penal y da lugar a multas sustanciales. Además, las simulaciones de delito suelen acompañar otras infracciones, como las estafas. Para la sociedad, una denuncia falsa conlleva la pérdida de recursos policiales y la contaminación de sus bases de datos. Este tipo de delito es bastante común y generalmente perpetrado por ciudadanos que no tienen antecedentes penales.

Desde la Comisaría Provincial de Zamora se quiere lanzar un claro mensaje sobre estos hechos y advertir de las consecuencias y responsabilidades en las que se incurre con este tipo de denuncias en las que ciudadanos, mal asesorados por terceras personas o por creencias mal entendidas de la poca importancia de la estafa a las aseguradoras, pretenden obtener una indemnización del seguro y encubrir negligencias o descuidos.

La presentación de una denuncia falsa puede suponer la pena de prisión de hasta tres años y un perjuicio económico de hasta los 6000 €.