El Ayuntamiento de Zamora afronta una recta final de mandato frenética. El bipartito formado por IU y PSOE debe impulsar en los últimos seis meses previos a las elecciones la puesta en marcha de los grandes proyectos ideados para estos cuatro años. Y la sensación es que dará tiempo. "Está todo en marcha y no en los cajones", ha afirmado Miguel Ángel Viñas, teniente de alcalde y encargado del servicio de Contratación. Por delante, una importante lista de obras con varios millones de euros de presupuesto: el Banco de España, el nuevo parque de bomberos, el derribo de Feria 11, la conclusión del matadero, el ensanche del paso bajo la vía de Pinilla y el lanzamiento de los trabajos en el centro cívico de la Universidad Laboral. Todo esto, entre los meses de noviembre y mayo de 2019.

La finalización del proceso de liberación de la muralla es uno de los objetivos prioritarios para el equipo de Gobierno antes de que lleguen los próximos comicios. Ya se ha avanzado en este propósito con diferentes derribos tanto en la avenida de la Feria como en el entorno del palacio de Doña Urraca. Sin embargo, queda pendiente la obra de mayor envergadura, la que hará escombros el edificio número 11 de la Feria. Está previsto que en la jornada de este martes, durante el transcurso de la Junta de Gobierno Local, se dé luz verde al expediente para pasar a contratación. Tras soportar las arcas municipales el desembolso de 1.334.000 euros en concepto de expropiación e intereses, se calcula que el derribo costará algo menos de 200.000 euros. Con esta obra, se despejará un importante espacio de la fortaleza medieval.

Ya en fase de licitación se encuentran dos de las obras importantes que el bipartito se había marcado por objetivo para estos cuatro años. La Plataforma de Contratación del Sector Público cuenta ya entre sus anuncios con el antiguo matadero de la avenida de Galicia y el paso bajo la vía en Pinilla. El primero de los proyectos tiene una base económica de 876.000 euros que servirán para finalizar unos trabajos enrocados desde hace décadas. Allí se establecerá una biblioteca pública municipal y un centro de adultos dependiente de la Junta, aunque por el momento es imposible ofrecer fechas de arranque y finalización de obras. En el segundo caso, la base licitadora es de 165.000 euros y se trata de dar una mayor amplitud a este vial de la calle Cañizal que soporta el tráfico de miles de vehículos cada día.

En lo referente a uno de los grandes fiascos del mandato, el de la obra del Banco de España, lo que se sabe a día de hoy es que se está terminando el pliego de cláusulas administrativas, que es el paso previo a la fase de licitación. En este caso, la espantada de la adjudicataria Urvios-Proforma dejó el proyecto en dique seco y sin haber si quiera completado un tercio de los trabajos. La estimación presupuestaria es de 671.000 euros y todo apunta a que será una de las obras que quedará empezada, aunque no finalizada, cuando expire el actual mandato municipal.

Ni está, ni se le espera

Uno de los grandes proyectos que ni está, ni se le espera, es el de la construcción del centro cívico y el conservatorio sobre el agujero del fallido palacio de congresos. Tras la reunión a dos bandas entre Guarido y Herrera de julio de 2017, técnicos de ambas administraciones han trabajado en el proyecto para el reparto de espacios. No obstante, el anuncio de las obras quedó a expensas de una visita del consejero de Fomento, Juan Carlos Suárez Quiñones, que no se ha producido y de la que no hay información. Más de 11 millones esperan su turno.