El juez está a punto de tomar declaración al acusado de violar a una joven zamorana de 23 años, a la que abordó la noche del lunes en la calle de Benavente de la capital e introdujo en un portal bajo amenazas con un cuchillo de cocina, la misma que utilizó para obligarle a acompañarle hasta el portal de la avenida de Príncipe de Asturias. El agresor permanece en las dependencias judiciales desde las nueve y media de la mañana, a la espera de la llamada del titular del Juzgado número 1.

Allí, el agresor, de 32 años y padre de tres hijos, tiene un piso en el que pretendía retenerla toda la noche para mantener relaciones sexuales, al que no llegaron a subir porque dos personas entraron en el edificio, la víctima logró zafarse del acusado y pedir ayuda mientras este huía. En el portal de la calle de Benavente, el arrestado, tras no poder consumar el acto sexual, obligó a la víctima a realizarle felaciones y a masturbarle, según relató la joven y admitió él mismo ante la Policía Nacional cuando se investigaba lo sucedido.

El investigado, de iniciales J.T.J., que fue detenido en tiempo récord por la Policía Nacional, a las 14 horas de cometer la agresión sexual, gracias a los datos ofrecidos por la víctima, a la que arrebató el teléfono móvil, y de los dos testigos que la socorrieron, será conducido con toda seguridad a prisión por la gravedad de los delitos cometidos, violación y retención ilegal, que no negó, aunque está por ver si se declara culpable de los mismos, puesto que en la Comisaría de Zamora no ha querido declarar, según ha podido saber LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, si bien se mostró colaborador con la policía judicial para localizar la ropa y las zapatillas que llevaba el día de la agresión sexual y el móvil de la joven.

El agresor responderá a las preguntas de la Fiscalía y de su propia abogada de oficio, que ya le asistió el jueves en la Comisaría, donde ha permanecido desde las 13.35 horas del martes, cuando fue arrestado en la casa de sus padres, en la calle de Cuba, donde se refugió tras violar la joven a las 22.30 horas de lunes y huir después de Príncipe de Asturias. Las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad de los negocios, edificios públicos y bancos ubicados en las calles Benavente y Santa Clara y en la avenida de Príncipe de Asturias han sido decisivas para armar las diligencias policiales, ya que se puede observar al acusado y a la víctima en todo el recorrido, y corroborar la versión de la joven a la que agredió sexualmente.