Las redes sociales han brindado que los docentes de música Alberto Jambrina y Gaby Bultmann se conocieran y entablaran una amistad, una cercanía que se materializa esta semana en una estancia de la profesional alemana en Zamora y en un concierto de la intérprete esta tarde en el salón de actos de la Alhóndiga donde la jefa de la sección Culturas de Música del Mundo, Teatro de Danza y Música en la Escuela de Música Leo Kestenberg de Berlín tocarán temas medievales, renacentistas y barrocos.
"Los dos visitamos una página de Facebook de Pipe and tabor, me pidió amistad y acepté. Estaba interesada en una jota de Extremadura que quería practicar con sus alumnos, pero no estaba completa en Youtube y me pidió que le completara las partes que faltaba. Con la ayuda de Marta Serrano completamos la "Jota Cuadrada". Tras un tiempo me comentó que desearía hacer una estancia en España y decidió venir una semana a Zamora y asistir a todas las clases que pudiera de flauta y tamboril en una de las escuelas de Consorcio de Fomento Musical de Zamora y posteriormente va la Universidad de Cáceres", explica el profesor y folclorista Alberto Jambrina, mientras que su colega alemana añade que viene a realizar "una observación participante", a recibir clases con distintos profesores de flauta y tamboril, pero también a conocer cómo imparten las clases intergeneracionales en el Consorcio de Fomento Musical.
"Es una inversión total en la música y en el idioma" asegura la germana que ha realizado numerosos conciertos en festivales y en series de conciertos en toda Europa tanto de piezas renacentistas como contemporáneas.
"En mi escuela, que tiene actualmente unos 5.000 alumnos, existe una tradición de más de 30 años del departamento de música del mundo centrada en música africana o sudamericana, pero poca de Europea", comenta la profesional que hace cinco años, cuando se hizo cargo del departamento, organizó curso colectivos de trompa alpina porque faltaba la presencia de la cultura Europea. "Ahora con mis alumnos de flauta dulce toco la flauta de tres agujeros inglesa no la que se toca en Zamora" a lo que agrega: "La música tradicional de Zamora me gusta mucho, mucho". El descubrimiento del folk zamorano vino acompañado de la danza. "Buscaba bailes españoles para mis alumnos y me encontré mucho más" describe Gaby Bultmann que hasta ha reconstruido varios instrumentos musicales perdidos, por ejemplo, la viello-flauta que ha hecho a partir de unos frescos de una iglesia italiana del siglo XVI. "No me gusta la idea de un conocimiento limitado de la música antigua. No conocemos todos los instrumentos que existían. Hay muchos que se han perdido, pero los detalles que aparecen en muchas pinturas nos pueden facilitar su reconstrucción", testimonia.
El primer contacto con las clases de flauta y tamboril han sido "realmente muy interesante", enfatiza esta profesional que toca muchos tipos de flautas y que alude a que "la tonalidad es distinta en cada tipo de flauta". Gaby Bultmann comenta que en su escuela parte de la formación es colectiva y parte individual, mientras que las clases que se imparten en las distintas aulas de música que tiene el Consorcio de Música de Zamora diseminadas por la provincia se opta por una enseñanza grupal e intergeneracional, lo que permite que compartan clases adultos con niños.
De esta inmersión la profesional alemana pone en valor "el repertorio del tamboril" y asegura que hoy tocará con distintas flautas de tres agujeros de repertorio italiano, medieval, renacentista y una obra moderna de un compositor mexicano.
