Un corte de suministro eléctrico de grandes proporciones aunque por fortuna con una duración limitada se produjo ayer en Zamora capital y pueblos adyacentes hacia la una menos cuarto de la tarde.
El motivo del corte de luz estuvo en una incidencia registrada en una planta fotovoltaica, que hizo saltar una línea de alta tensión, denominada Circunvalación 2, en la capital zamorana.
El corte de luz se dejó sentir en buena parte de la ciudad, sobre todo los abonados que dependen de los centros transformadores de San Bernabé, en el Casco Antiguo y San Frontis, en el parte oeste de la ciudad y también en localidades del entorno de la capital como son Villaralbo, Morales del Vino.
En total fueron 33.000 los clientes afectados, según los cálculos de Iberdrola, compañía que prácticamente de inmediato pudo solucionar el problema para la mayoría de ellos, ya que logró reponer el suministro casi automáticamente. De hecho, el 52% de los abonados que se habían quedado sin luz recuperaron en servicio en un minuto, al 76% les había vuelto ya la energía a los tres minutos y los que más tardaron estuvieron sin electricidad durante catorce minutos.
Fueron los propios servicios de la compañía desde la central de Valladolid los que pudieron restaurar el flujo de la electricidad hasta lograr devolver el suministro a la mayor parte de los usuarios en cuestión de pocos minutos.
El apagón fue, no obstante, bastante importante por la extensión que tuvo, ya que afectó a un gran número de abonados de Iberdrola.
