Cuando las hojas de los árboles apenas han empezado a caerse y el Adviento queda lejos en el calendario, la Navidad parece que se ha colado de lleno en la ciudad de la mano de la Agrupación Belenista La Morana. El colectivo inauguró a lo largo de la jornada de ayer (festividad de San Francisco de Asís patrón de las asociaciones belenistas) nueve exposiciones en distintos marcos, como iglesias o la Biblioteca Pública, pasando por espacios expositivos habituales para los montajes navideños, como La Encarnación o San Ciprino, como preámbulo del LVI Congreso Nacional Belenista que albergará Zamora entre el 11y el 14 de octubre.

La primera propuesta en abrir sus puertas correspondió a la montada en la iglesia de Santa María La Nueva. En "La transformación de la materia. José Luis Mayo Lebrija" el público local y los congresistas bucearán en la trayectoria de un gran escultor vinculado al mundo belenista que " ha cambiado la plástica y la percepción de la Navidad. Los nuevos figuristas del belén surgen del trabajo de José Luis Mayo Lebrija", subraya el presidente de La Morana, Francisco Iglesias Escudero. Y es que el visitante puede contemplar ejemplos de escultura decorativa, pasando por representaciones de la Virgen (principalmente de la Inmaculada) que dialogan con el Cristo Yacente que los hermanos de la Penitente Hermandad de Jesús Yacente procesionan la noche del Jueves Santo. Distintas presentaciones del belén, entre ellos varios dioramas, dan paso a imágenes de Cristo desde un Ecce Homo a un Crucificado en el pequeño templo.

A escasos metros se encuentra otra de las sedes de la ruta. La iglesia de la Magdalena, donde se profundiza en el belén existente en Portugal a través de la colección de Basanta-Martín. "Con motivo del congreso pensábamos que siendo Zamora una provincia rayana teníamos que hacer un guiño a una tradición belenista tan fuertemente arraigada en Portugal y le propusimos a Antonio Basanta traer sus belenes", concreta Francisco Iglesias Escudero.

Las piezas que conforman "Presepios. La magia de los belenes portugueses" tienen en común el estar hechas por artesanos en activo. "Es una manera de dar una pincelada de la actualidad artesana y de mostrar la vigencia y la implantación social que tiene el belenismo que genera empleo", precisan desde la Agrupación Belenista la Morana al tiempo que María Mayo Sánchez, quien ha elaborado el montaje, subraya que se muestran ejemplos "de norte al sur de Portugal" y una gran variedad estética, estilos y materiales que se utilizan en "escenas costumbristas con elemento simbólicos". "Puede verse desde un misterio en el que la Sagrada familia está durmiendo, un conjunto surrealista o incluso una urna de estilo conventual", enumera.

La sala de exposiciones de la Biblioteca Pública del Estado da luz a parte de la interesante colección Hernánz-Casado centrada en los belenes de papel. En este espacio se adentra en esta técnica y su evolución a través de más de 150 conjuntos, procedentes de la antigua Checoslovaquia y actual República Checa, Italia, Francia y también de España datados entre el siglo XVIII y el XIX. A ello se unen figuras planas recortadas ya situadas en montajes escénicos, teatrillos e incluso ejemplos de libros desplegables que al abrirlos brota un nacimiento o bien hojas de papel con las figuras impresas y coloreadas porque "el origen de estos belenes es el pliego de papel", puntualiza su propietario Ángel Hernánz que también presenta un belén realizado por sus sobrinos. Unos ejemplos que demuestran que el belén de papel es más que una construcción dirigida a los más pequeños.