Un hombre que conducía ebrio, sin permiso para ponerse al volante y sin seguro del vehículo acaba de ser condenado a 61 días de trabajos en beneficio de la comunidad, además de verse privado de conducir durante un año, tras provocar un accidente en el que solo hubo que lamentar daños materiales, valorados en unos 7.500 euros. El siniestro tuvo lugar cuando colisionó contra cuatro vehículos estacionados en la avenida de Maragatos, en Benavente. El imputado se fue hacia uno de los coches aparcados, impacto que afectó al turismo que había delante también estacionado. Al tratar de maniobrar para enderezar su automóvil, el acusado se fue hacia el otro lado de la calle, donde terminó colisionando con otro turismo aparcado que, a su vez, golpeó al de delante también parado. El procesado, que admitió los delitos ayer en el Juzgado de lo Penal y se conformó con las penas solicitadas por la Fiscalía, se negó a realizar la prueba de alcoholemia en el momento del accidente, ocurrido el 20 de febrero de 2016, si bien los análisis de sangre que le realizaron en el hospital al curarle de las heridas confirmaron la embriaguez.