Las pernoctaciones en alojamientos de turismo rural crecieron en Castilla y León en un 1,8% por ciento durante el pasado mes de julio respecto al mismo periodo del año precedente. Según los datos de la Encuesta de Ocupación en Alojamientos Turísticos extrahoteleros hecha pública por el Instituto Nacional de Estadística (INE), Castilla y León contabilizó en julio un total de 185.953 pernoctaciones frente a las 182.697 del año precedente, pese a lo cual se contrajo el número de viajeros, desde los 78.421 del año anterior a los 78.354 de este ejercicio.

A nivel nacional, en los alojamientos de turismo rural se ocuparon el 28,7% de las plazas, y el grado de ocupación en fin de semana se situó en el 44,53%, mientras que en Castilla y León esos guarismos quedaron fijados en un 18,2% de ocupación de las plazas, que aumentó hasta el 38,4% en los fines de semana. La comunidad sigue siendo el principal referente en turismo rural en España, al albergar el 16,7% de las pernoctaciones contabilizadas en todas las autonomías, por delante de Asturias (16%), Cataluña (9,4%) y Cantabria (8,4%). La mayoría de los viajeros que llegaron el pasado mes de julio a Castilla y León, un total de 78.354, fueron residentes en España (70.483) y el número de extranjeros fue muy inferior (7.871). De esta manera, Castilla y León fue la que contabilizó mayor número de viajeros en turismo rural, seguida, aunque de lejos, por Cataluña.