La apertura de apartamentos turísticos, las empresas de reserva online de alojamientos, la carencia de conectividad en muchos alojamientos rurales o el intrusismo por el alquiler ilegal de casas, según las asociaciones de turismo rural, contribuyeron al descenso de los plazas de turismo rural en el último lustro. En Zamora, con los datos más actualizados datados en el mes de junio de este mismo año, la variación de plazas ha ido a la baja en más de un siete por ciento. En conjunto, se han perdido unas 200 camas aunque, paradójicamente, la cantidad de negocios ha evolucionado positivamente. La conclusión es que han cerrado establecimientos grandes mientras que los que han abierto sus puertas en este periodo son más pequeños.

Desde la Asociación Vallisoletana de Turismo Rural, su actual presidente y expresidente de la Federación Castellanoleonesa del ramo (Acaltur), el zamorano Luis Chico, en declaraciones a Ical, "no" se muestra "preocupado" por las cifras relativas al turismo rural, puesto que responden a la "evolución del mercado" y este "se ha vuelto a restablecer", "el Mediterráneo y Oriente próximo ya son seguros y esto repercute, en cierta medida a la competitividad de la comunidad".

Chico cree que el turismo rural "ha tocado techo" por lo que es difícil recuperar los datos de años anteriores. Añade además que "hay gente que ya no vive del turismo" y "hay gente que lo utiliza como segunda fuente de ingresos" por lo que "es normal" que baje. El descenso lo atribuye también a la "apertura de apartamentos turísticos" y "empresas de reserva online de alojamientos" que "tiran por tierra" el turismo rural.

Asimismo, Chico se refiere a las campañas de promoción, que califica como "buenas", pero que muchas veces "no son un trabajo recíproco". "La provincia ofrece la capital como atractivo turístico y de ocio, pero la capital no suele ser solidaria con la provincia a la hora de promocionar su patrimonio", explica. Esta última problemática la ejemplifica con el enoturismo, "por mucho que quieran llevar el vino a las plazas mayores, al final las bodegas están en los pueblos de la provincia y se podría fomentar más que se acerquen a conocerlo sobre el terreno".

Otro de los motivos que justifica Luis Chico "puede ser la conectividad, hay muchos alojamientos rurales que carecen de conectividad, y muchos turistas buscan sitios con Internet, pero hay en pueblos en los que no es posible, y algunos que tienen, no lo pueden ofrecer porque la potencia es muy baja y la necesitan para gestionar su establecimiento".

Chico menciona también otros factores que pudieran influir en la creación de nuevos alojamientos, como podrían ser la categorización de ciudades como Capitales Gastronómicas, como Burgos en 2013, o este año en León, que en el caso de la provincia leonesa, se crearon nuevos establecimientos de turismo rural en un 0,7 por ciento. Además "el AVE a Zamora va a incrementar los alojamientos rurales en esta provincia", añade.

"Cada vez hay más gente que alquila sus casas de manera ilegal por lo que repercute en la reducción de alojamientos". Igualmente, hay muchas personas mayores que deciden echar el cierre de sus casas rurales, "este año he recibido alrededor de 50 llamadas de personas que querían cerrar, y me pedían que buscara alguien para que se hiciera cargo, pero no es fácil", concluye Luis Chico.