El bidé, que ha sido durante más de tres décadas un elemento obligatorio en todas las viviendas de Zamora, puede tener sus días contados en esa ciudad del Duero, ya que los responsables municipales se plantean ahora cambiar la norma que obliga a ponerlo, por considerarla obsoleta.

Este grifo de agua, diseñado originalmente para el lavado de la intimidad femenina y utilizado también para los baños de asiento y para lavarse los pies, es un requisito imprescindible para conseguir la licencia de primera ocupación en Zamora al menos desde 1986, según ha admitido la arquitecta municipal, María Ángeles Marcos.

Ella lleva en el cargo más de 25 años y siempre ha aplicado la normativa municipal que obliga a su uso, recogida tanto en el Plan General de Ordenación Urbana de 1986 como en el de 2001 y en el actual, aprobado en 2011, pese a que ha reconocido a Efe que esa exigencia puede parecer "algo ridícula" y "todo es revisable".

Popularizado en España en los años sesenta y setenta del siglo pasado, cuando se empezó a incluir en los baños de los nuevos edificios de viviendas como un elemento distintivo, el bidé entró en declive con el paso del tiempo.

Acordes con la nueva época, las normativas municipales dejaron de exigirlo como elemento obligatorio. En Zamora, en cambio, ha pervivido la norma que obliga a instalarlo pese a que hoy en día en muchas casas no deja de ser poco más que un elemento decorativo y es el primer candidato a ser retirado en las reformas de los cuartos de baño.

"Cada uno en su casa verá el uso que le da al bidé, pero no se trata solo de ver el uso de cada uno, sino de ver si socialmente es relevante exigir que haya un bidé en el cuarto de baño", ha declarado a Efe el concejal de Urbanismo de Zamora, Romualdo Fernández.

A su juicio, la normativa que obliga a poner bidé en todas las viviendas está "obsoleta", aunque no tiene claro que haya una necesidad social que exija el cambio inmediato de la normativa. De hecho, la próxima modificación del PGOU, el marco normativo que es necesario revisar, aún no tiene fecha.

Para cuando se acometa la revisión, los técnicos del servicio municipal de Urbanismo han ido anotando una serie de cuestiones que con el paso del tiempo se han dado cuenta que es necesario modificar y entre ellas se ha incluido la obligatoriedad del bidé en al menos un cuarto de baño de la casa.

Mientras esa modificación llega, los técnicos del Ayuntamiento seguirán exigiendo el bidé en todas las viviendas de la ciudad como requisito imprescindible para conceder la licencia de primera ocupación.

En ese punto, el Consistorio zamorano seguirá siendo inflexible porque "es la norma y hay que cumplirla" y solo hace la vista gorda en los pisos promovidos por discapacitados que tienen el baño adaptado a sus características, a los que se exime de esta exigencia.