El nuevo centro de día para personas con trastorno del espectro autista -que se construirá en los terrenos cedidos por el Ayuntamiento en la avenida de Valladolid y con una inversión de un millón de euros por parte de la Junta de Castilla y León- contará con un total de 18 profesionales para su funcionamiento diario. Las instalaciones dispondrán así de psicólogos, logopedas, pedagogos, educadores y cuidadores, además de personal de administración y cocina, que atenderán a los usuarios que ocupen las 32 plazas inicialmente previstas en el proyecto del centro.

Para Autismo Zamora este edificio es un paso de gigante en sus pretensiones de seguir ayudando a las familias de los usuarios una vez que llegan a la edad adulta. "Las personas con TEA precisan un modelo de servicios especializados, integral, específico, flexible, que abarque todo el ciclo vital y que asegure un proyecto de vida individual", apunta la presidenta de la asociación, Maribel Ramos.

De ahí la necesidad de este centro de día, que otorgará un servicio especializado de acogimiento diurno. "Zamora es una ciudad pequeña que cuenta con recursos limitados a la hora de responder a las necesidades de las personas adultas", reconoce Ramos. Hasta la fecha, los mayores, una vez cubierta su etapa educativa hasta los 18 años, se restringe a centro de carácter generalista que están provistos de atención básica "pero que carecen de metodología específica para trabajar con estas personas y darles una formación y orientación ocupacional para su promoción laboral y autónoma", lamenta.

Otra alternativa es que las familias se vayan a ciudades cercanas en busca de recursos específicos "en las que muchas veces no existen plazas libres o hay años de listas de espera", advierte. Para quienes no puedan acceder a ninguna de estas opciones, supone que los afectados con este trastorno se queden en casa sin atención específica, "lo que significa que un miembro de la familia tendría que estar a su cuidado, sin poder conciliar vida laboral y social e impidiendo el desarrollo digno tanto de la persona con TEA como del cuidador", afirma.

Con este centro para adultos se logran, por tanto, múltiples beneficios para los usuarios mayores de edad, desde ofrecer un servicio de aprendizaje continuo que posibilite el mantenimiento y ampliación de habilidades y destrezas hasta potenciar la adquisición y mantenimiento de las capacidades cognitivas, funcionales y sociales que permitan un desarrollo personal y una vida autónoma. Por otra parte, se intentará mejorar, o al menos mantener, el estado de salud y prevenir la aparición de enfermedades a través de la adquisición de hábitos saludables. Los usuarios dispondrán de entornos y actividades estructuradas y comprensibles para ellos, se les facilitará el acceso a programas ocupacionales y de empleo, se impulsará su acceso y participación social y, por último, se promoverán actividades deportivas y de ocio adaptadas a sus necesidades.