Ya no hace falta ser piragüista para poder contemplar Zamora desde la mitad del río Duero. La capital ha estrenado una barcaza que permite cruzar de orilla a orilla entre las aceñas de Cabañales y la playa de Los Pelambres. El transbordador, ideado para ser a la vez atractivo turístico y medio de transporte, funcionará durante cuatro horas al día transportando viajeros entre ambas márgenes a un coste cero para el usuario. Su tracción manual lo hace perfectamente compatible con el medio ambiente y recuerda, además, a tiempos pretéritos en los que este tipo de infraestructuras poblaban la provincia de Zamora. La barcaza, en definitiva, pretende ser un elemento de futuro con las miras puestas en el legado que el Duero ha dejado a lo largo y ancho del territorio provincial.

La ciudad de Zamora cuenta desde ayer con una barcaza en la que cruzar entre las orillas del río Duero con vistas privilegiadas al románico. Se trata de una estructura romboidal con cabida para doce viajeros y diseñada especialmente para afrontar de manera eficaz la corriente del río. El transbordador ha sido ideado por el arquitecto Pedro Lucas del Teso, quien se ha inspirado en otras barcas utilizadas a lo largo del siglo XX en diferentes pueblos de la provincia para transportar vecinos o ganado y que aún mantiene resquicios en localidades como Villaflor.

El viaje inaugural se celebró durante la mañana de este pasado viernes entre las aceñas de Olivares y la playa de Los Pelambres, en pleno Duero de la capital, con la presencia del alcalde, Francisco Guarido, y el concejal de Turismo, Christoph Strieder. Fue este último quien señaló las expectativas que el Ayuntamiento de Zamora ha puesto en el transbordador. "Lo que queremos lograr con la barcaza es aunar la apuesta por el turismo con la tradición arraigada de este tipo de comunicadores, de los que llegó a haber hasta 19 en todo el curso del Duero por la provincia de Zamora, algunos con gran actividad como los de Carrascal, Villaralbo o Granja Florencia", expuso.

El motor de la barcaza del Duero será, por el momento, manual. Una persona tirará del cable y se aprovechará de la propia fuerza del río para trasladar a los pasajeros de una orilla a otra. Sin embargo, no se descarta de cara al futuro mecanizar la estructura con la incorporación de un motor de impulsión. La barca permanecerá operativa hasta el mes de octubre en horario de 12.00 a 14.00 horas por la mañana y de 19.00 a 21.00 horas por la tarde. No obstante, el Ayuntamiento de Zamora baraja ampliar la temporada de cara al año que viene.

El promotor de la iniciativa, el arquitecto Pedro Lucas del Teso, dijo haberse inspirado en la barcaza utilizada en el propio río Duero para cruzar de un lado a otro de la ciudad mientras se llevaron a cabo las obras de eliminación de las torres de Peromato y la Gobierna y la restauración del Puente de Piedra, así como en la barca todavía existente en la localidad de Villaflor, que hasta hace pocos años era el único medio de transporte para cruzar el embalse del Esla entre ese municipio y el de Villanueva de los Corchos.

Con la puesta en funcionamiento de esta barcaza, la ciudad de Zamora suma un nuevo atractivo turístico y refuerza la decidida apuesta que el Ayuntamiento ha realizado en torno al río Duero como uno de los principales activos de la capital.