Entre otras leyendas transmitidas oralmente entre fermosellanos, la historia del Doroteo fue siempre la que más llamó la atención del escritor José Luis Barreña, nacido en Buenos Aires el 2 de abril de 1958. Sus padres emigraron a Argentina en 1949, a los 29 años, procedentes de Fermoselle, y siendo el escritor su único hijo. En su larga trayectoria, se ha dedicado a la política, a la docencia y al periodismo. "Justicia al Doroteo. El malevo de Fermoselle" es su último libro, en el que trata las vivencias del conocido personaje del municipio zamorano. Pero este no es su único libro, sino que ha publicado otros anteriormente con temáticas diferentes, desde la transformación de los pueblos argentinos con la llegada del ferrocarril en "Fin de vía" hasta leyendas sobre aves en América en "Aves con historia". Todas sus obras lo han llevado a viajar para conocer aquello que ha querido narrar, sobre todo en lo que respecta al elemento sociológico o histórico, debido a su trabajo como docente.

En sus libros, así como en su vida, tiene muy presente el tema de la emigración, tratando de entender a quien emprende este camino, su sentimiento y la dureza que ello conlleva. Su último relato es el más especial para él, por la carga sentimental que trae consigo al tratar un tema relacionado con su lugar de origen. El significado que ello tiene para el autor es muy profundo, "Fermoselle es mi pueblo, y aclarar algo de un retazo de su historia para mí es muy importante", comenta Barreña con emoción.

Sus expectativas con su última obra literaria son claras ante una historia escrita por los vencedores: "que la gente cambie su visión sobre el Doroteo, algunos que lo han leído me contaron que la cambiaron y creo que es un acto de justicia", apunta el escritor en su reivindicación de la figura de este personaje, visto como un ser malvado debido a la transmisión oral y a las fuentes históricas. De la misma manera, Barreña espera que una historia como esta sirva como un elemento turístico para el pueblo, transmitiéndose en otros lugares y animando a más gente a visitarlo y conocer los lugares en los que tuvieron lugar los acontecimientos en 1902.

"Justicia al Doroteo" ya fue presentado en Argentina, donde quienes han podido disfrutar de la narración han mostrado un enorme interés en el personaje, sobre todo en la parte que relata las vivencias del Doroteo en esa tierra. Además, otros descendientes de inmigrantes, conocedores de la publicación de la obra, también han querido su ejemplar del libro, y ya son varios los que han contactado con José Luis Barreña.

Su idea de convertir en novela la historia del Doroteo comenzó en el año 2016, en una visita al pueblo con su hija. Son estos los inicios de una obra que ha requerido de un largo proceso de documentación y de creación pero que, como dice el autor, "trata de buscar justicia después de cien años para alguien que no la tuvo en su día".

La primera parte del libro se centra en el viaje de Gabriel González de España a Argentina, "era una época muy especial porque llegaron muchos inmigrantes que se juntaban con criollos o gauchos y formaban los arrabales porteños", comenta el autor. Así, Barreña se ha basado en el ambiente argentino de finales del siglo XIX para recrear lo que pudo vivir el Doroteo tras su marcha. Pero esto solo no bastaba. En su búsqueda, el escritor se topó con la Hemeroteca Digital Hispánica, y ahí econtró una valiosa información sobre el "Crimen de Fermoselle", crónicas de la época que contenían los relatos de los testigos en el juicio por el asesinato del Doroteo. Entonces, Barreña observó que no todo lo que se contaba era verosímil y que había partes manipuladas por las autoridades de la época, grandes responsables de los terribles sucesos. "Me encontré con un Doroteo distinto y tuve que rehacer lo que había hecho", apunta el escritor.

Siguiendo este hilo, la segunda parte relata los hechos tras la vuelta del personaje a España, documentada sobre todo con las declaraciones del juicio por el conocido crimen. Pese al enorme trabajo, el escritor lamenta no haber podido tener acceso a las primeras declaraciones en Bermillo, cuando casi todos los presentes dijeron la verdad, creyendo que el caso no trascendería a Zamora ni mucho menos a nivel nacional.