Bernardo Prieto dijo que cuando ocurrieron los hechos él ni siquiera vivía en el pueblo. Declaró que su tarea como concejal era fundamentalmente trabajar por el pueblo y en el cargo de tesorero firmaba los libramientos de pagos, cheques que venían con la nómina y las facturas adjuntadas, sin que tuviera por qué dudar de que eran correctos, labor que correspondía más a la secretaria. En el último turno de palabra anunció que se va a querellar por falso testimonio contra quienes han declarado durante el juicio que se ha visto beneficiado por la actuación municipal de Marcelo Jurado, en la persona de su padre en un asunto de terrenos. "Se han dicho estas cosas con toda la mala idea de manchar nuestro nombre". Uno de los que apuntó en este sentido, a preguntas de su letrada y aunque reconoció "no tener pruebas" fue Félix Roncero, actual alcalde de Peleas de Abajo, quien indicó que su primera labor al frente del Ayuntamiento fue poner en orden el caos económico en el que estaba sumida la institución, por entonces el municipio más endeudado de España y fue solo cuando la situación estaba encarrilada cuando se metió a fondo con otros conceptos de la contabilidad municipal, como las dietas sin justificar de Marcelo Jurado, que suman 14.559 euros, una cantidad nada despreciable para un pueblo de unos 300 habitantes. Negó tener enemistad con Marcelo Jurado, pese a que éste presentó una denuncia contra él.