El Tribunal de Cuentas de la Unión Europea ha publicado un informe sobre la red ferroviaria de alta velocidad en el que denuncia la falta de pasajeros en algunas de las líneas españolas y sobrecostes en las obras, así como que los trenes circulan en algunos casos a una velocidad muy inferior a la prevista. La línea Madrid-Galicia, la que atraviesa la provincia de Zamora, es una de las peores paradas, puesto que el organismo detecta que circula a una velocidad que alcanza sólo el 29% con respecto a la prevista (110 kilómetros por hora, frente a los 350 kilómetros por hora esperados) y que, además, parte del trazado todavía utiliza el ancho tradicional frente al común de Europa, algo que "afecta al rendimiento".

Los auditores europeos han visitado España, Francia, Italia, Alemania, Portugal y Austria para analizar el gasto en más de 5.000 kilómetros de líneas de alta velocidad, lo que representa alrededor del 50% del total del bloque comunitario. En concreto, según recoge Europa Press, el documento analiza 10 líneas de alta velocidad (entre las que se encuentran el Eje Atlántico gallego y las líneas Madrid-León, Madrid-Barcelona-frontera francesa y Madrid-Galicia) y cuatro interconexiones transfronterizas.

En lo referente al AVE Madrid-Galicia, cuya línea atraviesa por completo la provincia de Zamora, el problema detectado es la falta de velocidad y la utilización del ancho tradicional en determinadas zonas. Además de esto, el informe revela que el coste no compensa el tiempo ahorrado. En el caso de esta línea, el cambio del tren convencional por el AVE reduce el trayecto en 110 minutos, por lo que cada minuto de menos ha costado 69 millones de euros.

El informe del Tribunal de Cuentas de la Unión Europea recoge, por último, los años que han tardado en completarse los trabajos de construcción de cada una de las líneas. En el caso de la Madrid-Galicia, si se cumple el plazo de abrirla en su totalidad el próximo año 2019, habría tardado 18 años en estar completamente lista.