"El cariño de la Fundación Personas se nota en el excelente resultado"

- ¿Cómo surgió el acuerdo alcanzado entre Saint-Gobain Placo y la Fundación Personas?

-Históricamente siempre hemos tenido la necesidad de tener muestras de producto y habíamos tenido diversas opciones para su fabricación. A través de mi relación con el centro de Morales del Vino porque un familiar mío está allí interno, en una de las visitas nos enseñaron el taller y pregunté al responsable del centro si había posibilidad de realizar este tipo de operaciones o de servicio y me dijo que sí. Concertamos una reunión para hacer una serie de pruebas en el taller que habitualmente utilizan para hacer determinados conformados de madera y como la placa de yeso a nivel de corte y manipulación puede considerarse similar, les cuadró la propuesta y decidimos firmar un acuerdo de colaboración.

- ¿En qué consiste la labor que tienen que desempeñar los usuarios del centro?

-Ellos se encargan de la recepción del material, el corte, el pegado de etiqueta, el retractilado y el encajado del material, de las muestras, para su posterior envío.

- ¿Desde cuándo se llevan fabricando estas muestras?

-Empezamos a trabajar a principios de este año. En la primera fase, en la que estamos ahora, se crean muestras de placas de yeso laminado y en la última reunión contemplamos una segunda fase también para la creación de muestras de techos.

- ¿Cuál es la valoración de estos primeros meses?

-Una de las cosas que más hay que destacar de este acuerdo de colaboración es que el resultado de estos primeros meses ha sido magnífico. Comparándolo con otras colaboraciones que hemos tenido, el resultado ha sido espectacular. De hecho, a todo el mundo le ha sorprendido. Tanto el director de Marketing y comercial como el director de venta de Placo han reconocido la buena labor que se ha hecho por parte de Fundación Personas. La calidad es muy buena teniendo en cuenta lo que conocíamos anteriormente. El nivel que hemos conseguido con este cambio ha sido muy importante para nosotros porque al final esa calidad de producto de muestras que vamos a mandar refleja una manera de trabajar.

- La inclusión sociolaboral de estas personas sería muy compleja de no ser por este tipo de convenios.

-Yo voy allí una vez al mes, tengo concertadas visitas para estar allí con ellos. Y cada vez que voy allí me entra una gran satisfacción de poder trabajar con personas que tienen ese tipo de discapacidad y a nivel mucho más personal porque como digo, un familiar no solo está en ese centro sino que de hecho también está involucrado en este proyecto porque participa en un momento de la cadena.

- ¿Quién es ese familiar?

-Es mi tío Manolo. Él también ve el acuerdo como que así le visito más. Siempre que la familia vamos a Sanabria intentamos ir por allí, pero sí que es verdad que con este proyecto yo estoy mucho más cerca de él, le veo una vez al mes. Una de las cosas que siempre me sorprende cada vez que voy allí es el cariño con el que tratan las cosas que están haciendo, es curioso que le den tanto valor y le pongan tanto cariño al simple hecho de pegar una pegatina, una parte de la cadena de trabajo. Llama mucho la atención y lógicamente todo esto luego se ve en el resultado final, un resultado excelente.

- ¿Cuál es su papel?

-En mi puesto de trabajo, una de mis responsabilidades es dar soporte con material de elementos de marketing a la red de ventas. Y dentro de ese soporte están las muestras de producto. Lógicamente cuanta mayor calidad tengan esas muestras de producto, mejor será para poder facilitar la venta a mis compañeros. Tutelo el número de muestras que tenemos que producir, la planificación y gestión de los envíos.

- ¿Cuáles han sido los primeros envíos?

-Se han realizado muestras de la placa Habito y de la placa Glasroc X, esos son los dos primeros productos de los que han salido unas 3.400 o 3.500 muestras con destino a las delegaciones comerciales que tenemos. Eso implica que se han hecho envíos a Bilbao, Barcelona, Logroño, Sevilla, Valencia, Madrid, Tenerife y Lisboa. Ellos preparan los pedidos en base a nuestras necesidades y nosotros tramitamos el transporte.

- Es nieto de Pepe el Gallego, el último maestro cantero de Sanabria. ¿Qué recuerdo guarda de él?

-Estar en el mundo de la construcción en gran medida se la debo a mi padre y a mi tío, es decir, a sus dos hijos. Y entiendo que ellos se la deben a él. La relación con mi abuelo siempre fue muy íntima y en el ámbito de la construcción aun más. Siempre recuerdo una anécdota que me contaban mis padres y es que siempre que pasábamos por delante del castillo de Puebla decía: "¡Mira mamá o mira papá, el castillo del abuelo!". La relación con Sanabria, en concreto con Santa Colomba, siempre ha sido muy cercana, lo sigue siendo y espero que lo siga siendo siempre.

- ¿Cómo ve la situación de Zamora?

-La despoblación no solo afecta a Zamora aunque es verdad que es una de las principales damnificadas. Vengo de un pueblo con 33 habitantes censados. Yo creo que al final la solución pasa por que la gente de la tierra piense en invertir en determinadas zonas. Dentro de esas posibilidades, están las nuevas tecnologías relacionadas con las energías renovables. A lo mejor no se les está dando el valor que deberían tener. Yo creo que todo esto pasa por que la inversión que se pueda hacer, en este caso en Zamora, venga de la parte zamorana que se ha ido y que pueda proponer o promover cosas que hasta ahora se estaban haciendo en otros sitios. Ahora que vuelve a sonar el tema de las energías limpias, podría ser una solución. Actualmente, desde Placo se está apostando por un proyecto de revalorización de residuos muy importante. No deja de ser una propuesta de valor y una opción que igual allí hasta ahora nadie se había sentado a pensar, pero ¿por qué no? También puede ser una opción para evitar que este proceso de despoblación siga.

- ¿Ya se ha recuperado del todo el sector de la construcción?

-Poco a poco ha ido recuperando el volumen o la importancia que tenía para que vuelva a ser puntero o al menos llegue a los niveles que teníamos antes de la crisis. Hemos tenido años muy difíciles y lo dice alguien que cuando acabó de estudiar se encontró en mitad de la crisis. Hay que tener en cuenta el refranero español, de todo se aprende y esperamos haber aprendido. Estos ciclos macroeconómicos nos volverán a llevar a una crisis mejor o peor, pero al menos esperamos que podamos pasarla mejor evitando determinados errores que se cometieron en el pasado.

- Un estudio dice que España necesitaría una nueva burbuja inmobiliaria ya que el parque inmobiliario está obsoleto y las empresas se centran ahora más en la reforma de pisos que en su construcción. ¿Comparte la opinión?

-Sí, tenemos un parque de viviendas relativamente viejo quizá también por la demografía del país. Es necesaria la renovación porque además hay una serie de implicaciones energéticas que vienen a reflejar la necesidad que tienen España y Portugal tanto de rehabilitación del envolvente del edificio como de instalación de nuevas tecnologías en el interior. Los años cincuenta, sesenta, setenta, la construcción tuvo una gran evolución y ahora toca volver a rehacer todo lo que se hizo en los años setenta, ochenta y noventa. Las modas cambian, la tecnología evoluciona y en materia de eficiencia energética ya vamos un poco tarde para cumplir los objetivos que nos habíamos marcado. Pero bueno, ¿por qué no llegar al siguiente punto de los objetivos que ya están fijados? Esperemos que esta vez sí que tengamos la conciencia de alcanzarlos y no solo la promesa en papel.