Los ajos son, este año, gordos, de buena calidad, aunque les ha faltado un poco más de calor sobre todo para que secaran un poco más las cañas, circunstancia que no es ningún impedimento para que el producto se conserve bien si se siguen las instrucciones adecuadas, sobre todo un lugar oreado a la sombra.

Es el resumen de la Feria del Ajo, concretada en los cerca de 800.000 kilos de producto que acercaron hasta la capital los 182 productores inscritos. Este año había huecos vacíos entre los 366 puestos preparados, pero menos que en otras ediciones, señaló desde la organización de Caja Rural de Zamora, Feliciano Ferrero.