En los últimos tres años Benavente y Toro solo han podido optar a 3 de las 32 subvenciones convocadas por la Diputación Provincial de Zamora desde junio de 2015. Así lo han denunciado sus responsables municipales Luciano Huerga y Tomás del Bien acompañados por el portavoz socialista en la institución provincial, Antonio Plaza.

Ambos regidores reprueban la política "sectaria y totalmente partidista" llevada a cabo por la Diputación en el presente mandato al sentirse "castigados" en las ayudas convocadas hasta la fecha por el órgano provincial, la mayoría de ellas dirigidas a entidades locales de menos de 5.000 y 2.000 habitantes. Un requisito que automáticamente deja fuera a Toro (con 9.000 censados) y a Benavente (con más de 18.000).

Con la relación de convocatorias de la Diputación en mano, Luciano Huerga detalla que Benavente y Toro solo se han beneficiado del Plan Municipal de Obras para las anualidades 2016 y 2017 y de la realización de actividades juveniles en las convocatorias de 2016 y de 2017, respectivamente. "Lo que pedimos es lo que hemos pedido durante mucho tiempo: objetividad, el dinero de todos para todos", sintetiza.

En este sentido, el toresano Tomás del Bien recuerda que "la Ley establece que la Diputación se tiene que encargar y ayudar a todos los municipios menores de 20.000 habitantes". Por eso, lejos de conformar una reivindicación más, del Bien va más allá y anuncia su intención de emprender medidas contra la institución: "No nos vamos a quedar en una rueda de prensa ni en una pataleta, en las próximas semanas con un equipo jurídico haremos una consulta al Consejo Consultivo y yo elevaré a la Federación de Municipios y Provincias esta queja".

El alcalde de Morales del Vino Miguel Piorno (Ciudadanos), también se suma a la protesta lamentando la exclusión del municipio moralino del Plan de Obras. "¿Acaso los ciudadanos de Benavente, de Toro y de Morales valen menos para la Diputación Provincial que cualquier otro ciudadano del territorio?", cuestionan de forma retórica ante este "quebranto gravísimo", según sus palabras, que afecta a más de 30.000 habitantes entre las tres localidades. Una cifra que, según sus cálculos, supone el 50% de los habitantes de la provincia sin contar con la población de la capital.

Así, "cansados de ser ninguneados", los tres alcaldes piden en favor de sus vecinos un reparto más equitativo de las subvenciones en el que no se produzca la actual "discriminación negativa" y un cambio en las políticas de la Diputación, donde ayer los regidores municipales de la provincia firmaron el convenio de los programas Dipnamiza I y II. Un acto de "vasallaje" hacia la presidenta Mayte Martín Pozo, en palabras de Tomás del Bien, e "injustificado e injustificable" al decir de Luciano Huerga por la progresiva implantación de la tramitación electrónica, que a su parecer solo buscaba "la foto" de la rúbrica.