La proximidad del verano y la abundancia de maleza provocada por una primavera extremadamente húmeda han puesto ojo avizor a los barrios de La Horta y Alviar, dos de las zonas de la capital más afectadas por el abandono de fincas. El Ayuntamiento de Zamora ha recibido durante la última semana a través del registro diferentes escritos que solicitan atención especial a los solares abandonados ante el riesgo de que se produzcan incendios estivales si no se desbroza a tiempo. El equipo de Gobierno ya ha notificado a unos doscientos propietarios la obligación de adecuar los terrenos abandonados en el plazo de un mes precisamente para evitar este tipo de peligros. No obstante, en los vecindarios se mantienen escépticos ante esta situación tras constatar que en años anteriores tan solo unos pocos acataron el mandato municipal pese a las amenazas de multa.

Uno de los escritos registrados en el Ayuntamiento de Zamora, perteneciente a un vecino de la calle Zapatería, denuncia el malestar de sus conciudadanos por el estado de los diferentes solares abandonados que pueblan la zona. "Actualmente, el barrio se encuentra en un estado lamentable y deteriorado en su totalidad. Existen solares abandonados que, en la llegada del periodo veraniego y con las subidas de las temperaturas, la maleza que existe en dichos solares constituyen un riesgo evitable y ahora se pueden evitar futuros incendios", señala.

Este vecino pide a la Concejalía de Barrios que actúe antes de la subida del mercurio. "Los solares son privados, sí, pero la Concejalía deberá encontrar una fórmula para obligar a los titulares al mantenimiento de los mismos", apunta. "No entendemos la dejadez en la que se encuentra La Horta, ni la desidia manifiesta que estamos viviendo. No entiendo que el equipo de Gobierno y esta Concejalía no tenga un programa de choque para evitar esta situación", detalla.

El Ayuntamiento de Zamora, hace escasos quince días, ha notificado a los propietarios de dos centenares de solares la obligación de mantener en condiciones de salubridad las fincas que se encuentran en situación de abandono tras una primavera calificada como "explosiva" desde el propio equipo municipal por la proliferación de hierbas altas y malezas. Los dueños tienen un plazo de un mes para acometer las actuaciones necesarias.