La improvisada pasarela de moda en que se convirtió en la tarde de ayer el patio de la Diputación Provincial de Zamora sirvió para lanzar un mensaje claro y contundente: existe vida más allá de la enfermedad. La Asociación Española Contra el Cáncer en Zamora junto con Amoena organizaron un año más el ya tradicional desfile de lencería y ropa de baño para mujeres operadas de cáncer de mama. Y ya son dieciséis ediciones.

Al igual que en años anteriores, en esta ocasión fueron siete mujeres pacientes de cáncer de mama que ya han pasado por la enfermedad las que se convirtieron en modelos por un día y arrancaron con su vitalidad los aplausos del nada desdeñable público que quiso acompañarlas durante este evento desarrollado al filo de las ocho de la tarde en el edificio de la institución provincial. Siete mujeres que, después de la lucha, han querido dar su testimonio de esta manera y decirle al mundo que la vida continúa después de una mastectomía.

Numeroso público acudió un año más a la llamada de la Asociación Española Contra el Cáncer en Zamora y Amoena, que una vez más ha querido sumarse con su colaboración a la celebración de este evento. Y es que esta celebración sirve no solo para normalizar los conjuntos para mujeres mastectomizadas sino también para dar un grito bien fuerte de ánimo a todas aquellas mujeres que a día de hoy están pasando por la enfermedad. La solidaridad, han apuntado siempre desde esta organización, es clave en este tipo de iniciativas y una edición más ha quedado patente que en Zamora de eso hay y mucho.

La cita se cerró con el reconocimiento a las siete modelos que han querido participar sin prejuicios en este nuevo desfile de lencería y trajes de baño para mujeres mastectomizadas.