Las elecciones del 28 de junio a la presidencia de Cofares, la mayor cooperativa distribuidora farmacéutica del país, que controla el 26% del mercado nacional de medicamentos, tienen un claro protagonismo zamorano. En primer lugar porque uno de los dos candidatos, José Antonio López Arias (Zamora, 1965) es zamorano, titular de una oficina de farmacia en la capital y con amplia experiencia en Cofares, empresa en la que estuvo 20 años, diez de ellos como director comercial y otros cinco como director general, hasta que su presunta implicación en el conocido como Caso Campeón, que salpicó al exministro socialista José Blanco, aconsejó su cese. Al final López Arias solo tuvo que ir a declarar una vez como testigo y el asunto fue sobreseído en los tribunales.

El otro protagonismo zamorano viene por la parte de Aquilino Rodríguez Fernández, que es el farmacéutico de Manganeses de la Polvorosa y consejero de Cofares de Castilla y León. Rodríguez sería uno de los consejeros que según publicó prensa especializada como "Crónica global" en su día habría participado en una suerte de "trama de las vacunas". En plena época de desabastecimiento de la vacuna Bexsero de la meningitis debido a que el fabricante no podía atender toda la demanda que se había disparado en España, tres consejeros de Cofares se habrían adjudicado más dosis de este producto de las que correspondían al resto de las farmacias, siempre según lo publicado por el mencionado medio. La información de este medio indica que la farmacia de Aquilino Rodríguez habría recibido 400 unidades de las buscadas vacunas, frente a una cantidad de entre 50 y 175 que habrían recibido el resto de cooperativistas. Este diario intentó ayer, sin éxito, hablar con Aquilino Rodríguez para conocer su versión.

Sin embargo el intento del presidente, Juan Ignacio Güenechea por investigar los hechos, no llegó a buen puerto, ya que el resto de consejeros se posicionó en su contra, lo que le obligó a dimitir.

Eduardo Pastor, su vicepresidente, cogió las riendas de la cooperativa y ahora se presenta como candidato a la presidencia, con José Antonio López Arias como único contrincante. El zamorano se presenta como el candidato que busca el cambio de rumbo en la cooperativa y apuesta por "la regeneración democrática. A mi me ha pasado de todo en esta campaña electoral, soy un poco el pepito grillo en este sentido, o el David contra Goliat, la estructura mueve todos sus hilos para que no se produzca ningún tipo de cambio. Los estatutos de Cofares son muy antiguos, permiten un voto escrito delegado, solo dos por persona, no permiten la participación de todos los socios, aunque no sea de una manera directa sí operativa, como demuestra el hecho de la junta de Castilla y León se celebró en Burgos y los farmacéuticos de Zamora tenían que hacer 230 kilómetros, los de León 200, al final si tu pones barreras físicas estás impidiendo que los socios puedan expresarse. Es importante la regeneración democrática que permita un cambio estatutario para que los socios puedan expresarse. Ahora teneos infinidad de posibilidades telemáticos".

López Arias considera que "lo que ha ocurrido con el Bexsero no hubiera ocurrido si hubiera una limitación de mandatos del consejo. Si los responsables, los miembros consejeros tuvieran una limitación de mandatos estarían más orientados a obtener resultados en que a generar relaciones de clientelismo con la estructura que les permita en un momento dado beneficiarse de estas relaciones". Ahora ya no hay problemas con el Bexsero.