La carencia de conocimientos básicos de informática de la envejecida población y la denominada "brecha digital" fueron algunos de los argumentos esgrimidos por Izquierda Unida para solicitar un "periodo transitorio" a fin de acostumbrar a los ciudadanos a la tramitación electrónica implantada por la Diputación. Una situación que fue denunciada recientemente por la Coordinadora Rural en relación al procedimiento telemático de solicitud de las ayudas convocadas para las asociaciones culturales.