esta noche, a las nueve horas, nuestro Teatro nos proporcionará una ración extra de flamenco en unas fechas no demasiado habituales. Programación no desdeñable y desde luego, sobre todo por lo inusual, muy de agradecer. Un cantaor que promete y que ya en presente ofrece.

Israel Fernández, sin ningún género de dudas es el mejor continuador, el más consistente y, de lejos, el más dotado de cultura flamenca de cuantos seguidores e imitadores clónicos haya tenido el genio de La Isla del León, esto es, José Monje Cruz, Camarón de la Isla. Y ello por tres razones de mucho peso. Primero, porque como el referente, es un infatigable buscador y rebuscador de las fuentes más preclaras del universal arte. Segundo, porque su seguimiento del maestro no tiene nada de mimetismo, es un seguimiento que aunque presenta cierta convergencia, Israel sabe bordearlo lo suficiente para darle su impronta personal. Finalmente, por sus facultades, también como el de San Fernando, muy bien apoyadas en su voz natural.

Con todo ello esta noche se acordará de la casa cantaora de los Pavón, empezando por Pastora, La Niña de Los Peines, su hermano -ese genio del cante en riesgo de exclusión para la historia del flamenco de no haber sido por su hermana- Tomás Pavón y su marido, el recordado Pepe Pinto. Bajo el justo pretexto de la presentación de su tercer y último disco denominado precisamente "Universo Pastora" y, cómo no, su bagaje del de La Isla.

Israel Fernández -que cumplió el pasado 14 de marzo 29 años y es de origen andaluz pero afincado en Corral de Almaguer de la provincia de Toledo- estará acompañado por el malagueño Rubén Lara a la guitarra y por Juan Motos a la percusión.

Con estos ingredientes, es seguro que los que se acerquen por el teatro no saldrán defraudados.