Tocan en un escenario profesional, con microfonía y luces manejadas por técnicos especializados la canción que han compuesto, tanto letra como música, titulada "Doce sonidos interminables", creada por el equipo integrado por alumnos y por profesores del IES Río Duero que este año ha tomado parte en la sexta edición del proyecto de innovación "Música Inmediata" y que ha demostrado su arte, primero, en la fase desarrollada en el centro cívico Canal de Castilla y posteriormente en el centro cultural Miguel Delibes de Valladolid.

En esta ocasión, la cuarta que el centro se involucra en la actividad, además del departamento de Música se ha implicado el de Plástica. "La canción "Doce sonidos interminables" hace alusión a la escala cromática, que es ir pasando los intervalos musicales de medio en medio tono, y guarda una estrecha relación con el mundo pictórico, donde el cromatismo es utilizar toda la gama colores. Le planteé a la profesora de Plástica, Carmen Matos, la posibilidad de sumar fuerzas y varios alumnos suyos han realizado un grafiti", explica el docente de la materia de Música, Alberto Jambrina.

La dificultad de realizar la obra artística sobre el escenario en directo mientras que los compañeros tocaban la composición instó a que se buscara otra solución para mostrar en detalle proceso creativo. La solución conllevó implicar la imagen en el proyecto de "Música Inmediata" de la mano de un alumno más que grabó toda la génesis del trabajo pictórico, un vídeo que se ha proyectado durante las actuaciones del grupo del Río Duero.

El equipo del centro zamorano lo integran tanto docentes como alumnos de distintos cursos e incluso el conserje del instituto que tocan percusión, piano a cuatro, bajo, tuba hasta guitarras eléctricas, saxos e incluso tres jóvenes cantan. "La música cohesiona porque participan alumnado de 1º, 2º y 4º de ESO así como de Bachillerato y varios profesores que coincidimos ensayando, por lo que el proyecto supone una inyección de convivencia en el seno del propio centro educativo", asevera con rotundidad Alberto Jambrina. El profesor de Música señala también que "se trata de una experiencia muy interesante en esta ocasión hasta interdisciplinar que implica muchas horas de trabajo para preparar la canción, que intentamos tener para el festival que hacemos en el centro días antes de las vacaciones de Navidad, y de ensayos durante los recreos".

Sobre el escenario del Miguel Delibes a los compañeros que tocaron en el Canal de Castilla se unieron por primera vez una alumna que cursa 3º de la ESO que tocó la Trompa y dos bailaron además se proyectó un amplio vídeo con todo el proceso de confección del grafiti. "Algunos alumnos es la primera vez que pisaron un escenario y seguro que no olvidarán la experiencia", relata Jambrina.

Entre las curiosidades de esta segunda actuación, para la que se desplazaron desde Zamora 48 personas de las cuales 18 pisaron el escenario, figuran que los chicos que tocaban el teclado, tuvieron la oportunidad de interpretar con un piano de cola y que los percusionistas participaron con otros grupos. "En la primera fase nos escucharon de otros institutos y nos pidieron que les ayudáramos a redondear alguna otra canción. Tras hablarlo, nos pasamos los temas de tal forma que les ayudaron como una forma de cooperación entre centros".