Eva Ponte/Susana Arizaga

La Guardia Civil recaba pruebas para confirmar si detrás del brutal asesinato de la joven de 33 años Leticia Rosino, muerta a golpes con grandes piedras en Castrogonzalo, pudo haber un intento de agresión sexual por parte del único detenido, de iniciales J.F., un vecino del pueblo apodado "El Pastor", dados los indicios hallados en la escena del crimen, los leguis y otras prendas íntimas de la fallecida, de acuerdo con la información obtenida por LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA.

La confesión de uno de sus hijos menor de edad, que lo habría delatado, parece decisiva. Los hechos encajan, además, con los antecedentes del único sospechoso, al parecer condenado a prisión por violación en 1980, de acuerdo con la información a la que ha tenido acceso este diario. El asesinato habría tenido lugar entre las 18.00 y 19.00 horas del jueves, cuando la víctima paseaba por las inmediaciones del río Esla, como era su costumbre, momento en el que se habría visto sorprendida por el acusado, que le habría salido al encuentro con intención de agredirla sexualmente, según todos los indicios recabados por la Guardia Civil durante la madrugada y la mañana de ayer, según ha podido saber La Opinión-El Correo de Zamora.

La mujer, cuyos leguis y ropa interior fueron recogidos en las inmediaciones el lugar en el que apareción el cadáver, habría intentado zafarse del detenido, de iniciales J.F., cuando este trataba de forzarla o ya lo había conseguido, extremos que tendrán que confirmar la autopsia.

La posibilidad de que la joven huyera habría desatado la furia del arrestado ayer, quien le habría golpeado con una piedra en la cabeza sin lograr que la mujer detuviera su marcha. Esta circunstancia habría provocado una segunda agresión con otra piedra y el despleme de la joven, que se arrastró por el suelo hasta que su agresor pudo volver a alcanzarla con una piedra de mayor dimensiones, de varios kilos de peso, que descargó brutalmente contra su cabeza, según los datos a los que ha tenido acceso este diario.

Una vez que el agresor habría comprobado que Leticia Rosino estaba muerta, habría lanzado su cadáver al terraplén situado junto a la planta de residuos tóxicos del municipio, donde se pudo observar sangre en una de las paredes, de acuerdo con los datos recogidos por este diario de testigos que participaron en la búsqueda de la joven, que llegó a vivir a la localidad de su novio hace apenas dos años, después de hacerlo en Benavente.

Fueron, precisamente, los restos de sangre en el suelo, de gran abundancia, que marcaban los puntos en los que la joven cayó al ser golpeada por las piedras, lo que permitió a los vecinos y amigos que emprendieron la búsqueda hacia las 20.00 horas presagiar lo peor. Avisados los agentes de la Gaurdia Civil, el cuerpo apareció tirado en el terraplén.

El hombre estaba ayer a la espera de pasar a disposición judicial, tras ser detenido y conducido a las 14.30 horas al cuartel de la Guardia Civil de Benavente, donde negó ser el autor del crimen y del intento de agresión sexual. Se ha mantenido frío y sereno en todo momento, según ha podido saber este diario. La intensa labor policial llevada a cabo desde el mismo instante en que apareció el cuerpo sin vida de Leticia ha permitido obtener, al parecer, suficientes pruebas para determinar que "El pastor" actuó solo.