Luis González Rodero, profesor y secretario de la Escuela de Magisterio, completa el equipo de expertos que mañana miércoles debatirán sobre el MIR docente en las jornadas organizadas por LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA.

-¿Qué opinión le merece el MIR docente?

-Aunque ha resurgido este año el tema del MIR docente, fue en 2015, con el Libro Blanco sobre la Profesión Docente que coordinó el profesor José Antonio Marina, cuando empieza a surgir este replanteamiento en el acceso de la profesión docente. En este momento me parece una oportunidad de debate y toma de decisiones de cara a un futuro replanteamiento de la función docente, donde toda la comunidad educativa pueda aportar sus ideas y pueda plantearse un sistema, lo más consensuado posible de acceso a la función pública. Aunque también me parece necesario un Pacto Educativo, como requisito previo.

-¿Qué es lo que falla en el sistema para plantear un cambio?

-No creo que sea porque algo falle, el que salga a la luz significa que podemos modificar los procedimientos, plantear alternativas que representen a los diferentes colectivos y tratar de mejorar en lo posible el sistema. Si en los últimos informes PISA publicados Castilla y León está obteniendo unos buenos resultados a nivel de España bastante buenos y a nivel mundial está entre los 15 países mejores del mundo, con unos resultados a nivel de lectura semejantes a Finlandia, es porque el profesorado que está trabajando actualmente en los centros educativos de Castilla y León, está desarrollando extraordinariamente su trabajo, no está fallando el sistema. El fallo actual, desde mi punto de vista, es la dificultad de consensuar un Pacto Educativo entre los políticos y que la educación se haya convertido en una baza electoral en lugar de un punto de encuentro. Otra variable muy importante es que tenemos en marcha actualmente 17 sistemas educativos, lo cual hace muy complicado el consenso y la toma de decisiones.

-Los impulsores del MIR argumentan que el actual modelo no es válido para seleccionar adecuadamente al profesorado.

-La gran cantidad de candidatos a las plazas hace que tengan que organizarse un tipo de pruebas para poder atender a esa demanda. Las pruebas objetivas garantizan el seleccionar a los candidatos con mejor dominio el temario, pero no es posible el desarrollar otro tipo de pruebas selectivas actualmente con la gran afluencia de candidatos a los procesos selectivos. Por otro lado, entra en juego la experiencia docente y el currículo del candidato o candidata. Siendo coherentes con el planteamiento del MIR educativo, mi criterio sería dar un mayor porcentaje en la prueba al resultado de los exámenes de oposición y reducir el porcentaje asociado a la experiencia.

-¿También es necesaria una mejor formación de los profesores?

-Considero que es el objetivo de todas las facultades y escuelas de formación del profesorado el tratar de mejorar la formación del profesorado, tanto a nivel curricular didáctico, en las diferentes materias, como metodológico, así como una mejora en el ámbito de las lenguas extranjeras. Constituye un reto para todos los equipos directivos de los centros y el profesorado universitario.

-¿Es partidario de endurecer los criterios de acceso?

-Comparto la opinión de la Conferencia de Decanos de Educación de incrementar las notas de acceso en la universidad a los estudios del grado de Maestro. Recibimos estudiantes muy motivados por ser futuros maestros así como estudiantes que no han podido acceder a otras carreras y de las últimas opciones que se planteaban era el realizar estos estudios, con escasa motivación hacia los mismos. Ambos grupos conviven en las aulas y los intereses son muy distintos.

-¿Sería viable ese programa de formación práctica supervisada por un tutor durante dos años?

-Viable pero complicado de poner en marcha tal como está el sistema y a coste cero; necesitaría nuevas dotaciones económicas y crear nuevas figuras docentes semejantes a las existentes actualmente en el ámbito de las Ciencias de la Salud, con tutores tanto académicos en la Universidad como en los centros educativos, en las distintas etapas educativas.