La presentación de las actas y la documentación de la adjudicación de los pastos en los municipios en los que los agricultores y ganaderos perciben la PAC de la Unión Europea es imprescindible para que los beneficiarios puedan recibir la cuantía que le corresponda por hectárea aprovechada. De modo que, las actas que presumiblemente se falsificaron el año 2015 en Malva para poder acceder a la ayuda comunitaria se entregaron a la Cámara Agraria provincial, cuyo secretario técnico manifestó que no podía saber si el trámite seguido en Malva era o no legal al resultarles imposible comprobar el sistema que se sigue en las más de 140 Juntas Agropecuarias de la provincia, como tampoco lo hizo la Junta de Castilla y León.

La Cámara sí detectó que las actas de Malva de reparto de pastos de 2015 tenían idéntico contenido pero diferentes firmas de vocales y que en ninguna de ellas figura la secretaria, de acuerdo con el testimonio del secretario técnico que compareció ayer en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial por falsificación en documento público.

El funcionario confirmó que la adjudicación de los pastos se efectúa desde la Comisión de Pastos, que pueden formarla dos miembros de la Junta Agropecuaria y ganaderos, reparto que se hace una vez escuchados los ganaderos del municipio. La secretaria de la Junta de Malva comunicó a la Cámara Agraria su disconformidad con el reparto hecho en 2015.