Las amenazas que las niñas recibían de su presunto agresor sexual estaban relacionadas, al parecer, con los malos tratos que ejercía sobre la madre de las menores de edad, con quien mantenía una relación sentimental desde 2012, si bien solo vivieron bajo el mismo techo los últimos dos años.

Los episodios de violencia de género serán también objeto de la investigación judicial, puesto que la mujer había puesto de manifiesto en la denuncia ante la Comisaría de Zamora que el acusado de agredir sexualmente a sus dos hijas menores de edad la había maltratado durante el tiempo que duró su relación sentimental.

Las niñas corroboraron que lo que su madre contaba era verdad, que el investigado la sometía a maltrato, una violencia tanto física como psicológica, por lo que ambos casos serán tramitados por el Juzgado de Violencia de Género de Zamora, el número 5 de la capital, que asumirá las diligencias abiertas por la Policía Nacional y por el juzgado de guardia. Las mujeres víctimas de este delito pueden llamar al 016, número de teléfono gratuito que no deja rastro o acudir al Colegio de Abogados, donde hay un turno de oficio.