Una conmovedora y divertida obra que ahonda en la fragilidad de la vida llega el domingo el Teatro Reina Sofía de Benavente a partir de las 20.30 horas.

"La velocidad del otoño" habla de Alejandra, quien se enfrenta a su familia por el lugar donde va a pasar el resto de los años que le quedan de vida, ya que sus hijos la quieren enviar a una residencia para quedarse con sus propiedades. Estas circunstancias mueven a esta viuda a quien le gusta el arte, pintar y que envejecía sosegadamente, una mujer interpretada por una de las grandes damas de la escena española Lola Herrera, a atrincherarse en su piso del centro, un edificio de valor histórico, amenazando con cócteles molotov para destuirla.

Sus dos hijos mayores no van a permitir que prenda fuego a la herencia, por lo que recurren a la figura de un mediador, uno de los vástagos, Cristóbal, del cual no ha sabido nada en veinte años y que será el encargado de devolver el juicio a su anciana madre. Al hijo pequeño, sensible y frágil, tras una coraza que utiliza para defenderse de la vida, da vida el actor Juanjo Artero.

La comedia "La velocidad del otoño", que, sin duda, pone en valor a la tercera edad y aborda los problemas que le acucian en una época de la vida, supone el reencuentro de estos dos ases de la interpretación que ya trabajaron codo con codo en la obra "Seis clases de baile en seis semanas".

En esta ocasión, los actores están a las órdenes de Magüi Mira, quien además de la directora del montaje es la responsable de espacio escénico en esta producción de Jesús Cimarro, basada en un texto del dramaturgo estadounidense, Eric Coble y adaptado por Bernabé Rico.