El nuevo Museo de Semana Santa de Zamora será, más que un espacio expositivo, "una experiencia didáctica y sensorial". Ese es el objetivo marcado en el anteproyecto museográfico elaborado por el experto Enrique Bonet que ha sido presentado hoy por la Junta de Cofradías. La presidenta del órgano, Isabel García Prieto, ha dado pinceladas del proyecto llamado a convertirse en revulsivo para la ciudad de Zamora, aunque también habrá especial atención a la provincia. La idea, de hecho, es que el edificio se convierta en santo y seña de la Pasión de la capital y los pueblos.

La experiencia museística arrancará en el lejano siglo IV con las primeras expresiones de la Semana Santa en Jerusalén. "Queremos que la visita al museo sea un viaje por la historia de la Semana Santa para que todos puedan conocer de dónde venimos", ha indicado García Prieto. El museo se estructurará en diferentes espacios, que no salas, dedicados a las diferentes expresiones de Pasión en Zamora y provincia.

De este modo, el hilo conductor viajará por el nacimiento de la Semana Santa, la creación de las cofradías y la imaginería, en una visita dividida en capítulos cronológicos. Se prestará especial atención, además, a figuras relevantes como Ramón Álvarez, que tendrá un espacio propio, así como a la Semana Santa de la provincia.

El anteproyecto museístico es el primer paso antes de continuar con el concurso de ideas para el proyecto arquitectónico. Desde la Junta pro Semana Santa confían en que una figura de renombre se haga con el diseño del edificio.