La provincia de Zamora ha conseguido sobreponerse al final de la celebración de Las Edades del Hombre en la ciudad de Toro y ha registrado, durante el año que terminó hace unas semanas, más visitantes que en el ejercicio marcado (en el plano turístico) por la muestra religiosa. Los datos del Boletín de Coyuntura Turística que elabora la Junta de Castilla y León, referidos al periodo comprendido entre el mes de enero y el de noviembre del año pasado, muestran que el crecimiento del número de visitantes se situó en prácticamente el diez por ciento. Se trata de una cifra muy a tener en cuenta porque compara un ejercicio que tuvo un gran atractivo turístico con otro que no lo tuvo.

Con los datos en la mano puede concluirse que Zamora cerró el año pasado con más de cuatrocientos mil visitantes. Los datos elaborados hasta noviembre sitúan la cifra total de turistas en 394.323 personas por las poco más de 360.000 del año de Las Edades del Hombre.

Con todo, el dato tiene también su vertiente negativa. Todas las provincias de Castilla y León y Zamora está por debajo de la media. Es, además, la tercera provincia (solo por delante de Valladolid y Salamanca) con mejor tasa de crecimiento interanual de visitantes. La media regional habla de incrementos superiores al 13% llegando en algunas provincias, como León, a tasas de más de veinte puntos.

Y, como segundo punto negativo, hay que analizar la cifra total de visitantes. Es más alta que la del año pasado, es cierto, pero solo Palencia tiene menos visitantes en la comunidad autónoma. Los 394.000 registrados entre enero y noviembre se quedan muy cortos si se compara la cifra, por ejemplo, con los 1.423.652 de Burgos. Salamanca y León también pasan del millón y Valladolid se queda relativamente cerca.

La botella queda, por tanto, medio vacía o medio llena, según cómo se mire. Sin embargo, la situación deja varios interrogantes. Uno de ellos es qué datos tendría Zamora si, como vienen reclamando los hosteleros desde hace varios meses, Renfe aumentara el número de billetes que se venden para el trayecto que une Madrid con la capital del Duero. Señalan desde Azehos que el cupo es muy limitado y que los precios por los que se venden los billetes no van en la misma línea que para el viaje a Galicia, trayecto que proporcionalmente es más barato. "Renfe no debe obedecer a criterios económicos solamente, también a criterios sociales. Zamora ha sufrido las obras del AVE y merece ser tratada bien en este sentido", apuntan los hosteleros. El tema ya ha llegado al Senado, pero de momento nada se sabe pues ahora las reivindicaciones van en el sentido de un "tren madrugador" que permita a los zamoranos estar en Madrid a primera hora de la mañana en días laborables.

Por lo que refiere al número de pernoctaciones registradas en los establecimientos de hostelería de Zamora, y de nuevo con los datos del Boletín de Coyuntura de la Junta en la mano, la cifra ha crecido aproximadamente en un once por ciento hasta registrar en los once primeros meses del año un total de 620.675 reservas. De nuevo nos encontramos con mejores datos que los del año pasado pero con una de las peores cifras de la comunidad.

El cruce entre viajeros y pernoctaciones deja una estancia media de 1,5 días. Es una de las cifras más bajas de la comunidad y vuelve a poner de manifiesto lo que ya se sabía, que Zamora no es capaz de hacer que los turistas se queden varios días en la capital. La ciudad es destino de paso o, en el mejor de los casos, para un fin de semana.