Desde hoy, lunes 15 de enero, la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León ofrece dentro de su cartera de servicios de Sacyl la detección de ADN fetal en sangre materna, una prueba también denominada "Test Prenatal no Invasivo" (TPNI). El ensayo forma parte del servicio de cribado neonatal y permite la búsqueda de aneuploidías o anomalías cromosómicas en los bebés no natos mediante el análisis de la sangre de las futuras madres. Según explican desde la Consejería, este estudio se desarrolla a través de un proceso no invasivo, por lo que tiene la ventaja de que permite detectar problemas genéticos en el feto sin riesgo para la gestante, ni para su hijo.

Este test se incorpora como prueba complementaria del cribado combinado del primer trimestre y se realizará a las gestantes con riesgo intermedio, lo que reducirá el número de pruebas invasivas. La prueba se oferta a todos los hospitales de Castilla y León, aunque el análisis de la muestra se realizará en el laboratorio del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid, ya que es el centro que cuenta con el equipamiento tecnológico necesario para poder hacerlo.