Es su primera experiencia laboral y el resultado no puede ser más satisfactorio, "a pesar de las muchas dificultades", subrayan. Daniel Capa y Sergio Crespo, estudiantes de Arquitectura Técnica en la Escuela Politécnica de Zamora, han vivido un mes en Dajla, en el Sáhara Occidental, para comenzar la construcción de un parque de bomberos, gracias a una misión promovida por la ONGD Acción Norte.

Por segundo año consecutivo, y a través de un convenio con la Universidad de Salamanca, dos estudiantes del Campus Viriato han podido desarrollar unas prácticas diferentes, trasladando al terreno el que será su proyecto de fin de carrera, para el que han contado con el asesoramiento de los profesores Jesús María García Gago y Jorge Javier Rodríguez Méndez. "El desierto impresiona nada más llegar", asegura Sergio Crespo. Ninguno de los dos había pisado antes suelo africano. "Es un continente totalmente distinto, la gran diferencia cultural nos impactó muchísimo", añade su compañero.

Tras casi 18 horas de viaje desde España, los estudiantes llegaron a Dajla, una ciudad en la que todavía son más que visibles los daños que dejaron las inundaciones de hace unos años. "El 80% de las casas están derruidas, al ser de adobe, y había mucha obra nueva", describen. A esos nuevos edificios se iba a unir el parque de bomberos que ellos habían proyectado y que servirá para dar no solo auxilio a la zona, sino también trabajo a algunos ciudadanos, a los que Acción Norte forma como bomberos.

"Nosotros íbamos con un proyecto bien definido, pero en seguida nos dimos cuenta de que había muchas cosas que habría que ir haciendo sobre la marcha", indica Sergio Crespo. Y es que la forma de trabajar y los medios de esa zona son totalmente diferentes a los que ellos estaban acostumbrados. "Desde la organización hasta la búsqueda de proveedores y materiales, recorriendo varias tiendas, todo es diferente", explica Daniel Capa. Eso les provocó que, por ejemplo, tuvieran que esperar varios días por un camión de grava. Finalmente, no hubo tiempo de realizar el proyecto al completo, pero dejaron asentada tanto la cimentación, como la estructura y la cubierta de la zona baja.

Están muy agradecidos tanto a los albañiles de la obra como a Germán Canelas, otro voluntario zamorano de Acción Norte que tiene ya amplia experiencia en el terreno. "De la facultad salimos con mucho conocimiento pero poca experiencia, así que fue un gran apoyo", valoran.

Tras finalizar su estancia en Dajla, estos estudiantes también tuvieron la oportunidad de pasar los últimos días en el Sáhara visitando otros lugares cercanos, como El Aaiún o Smara, donde peritaron dos hospitales de la zona que están a pleno funcionamiento pero necesitan algunos arreglos. "Uno de ellos funcionaba mediante baterías, con paneles solares que las cargan y lo abastece durante horas", explican. Allí convivieron con otros voluntarios, gran parte de ellos sanitarios. De las múltiples anécdotas que vivieron, la que más les impresionó fue su asistencia en un parto, al confundirles con médicos voluntarios. "Ayudamos en lo que pudimos", recuerdan con una sonrisa.

"Ha sido una experiencia gratificante en todos los aspectos", resumen ambos estudiantes, quienes presentarán el próximo mes de junio este proyecto como trabajo de fin de grado en la Escuela Politécnica de Zamora, con la vista puesta, además, en poder regresar para finalizar la construcción del parque de bomberos con la ayuda de la ONGD Acción Norte, "que hace un gran trabajo en esa zona y nunca se rinde", destacan.