El servicio de Urgencias del Hospital Virgen de la Concha de la capital zamorana ha estado colapsado, en momentos puntuales, durante el último día de 2017 y el primero de 2018. Así lo aseguran los representantes de los trabajadores del servicio, que indican que la afluencia de pacientes ha sido mucho mayor que en otros fines de semana, lo que ha provocado la saturación del servicio. De hecho, según las cuentas del sindicato de Enfermería Satse -así lo asegura su representante provincial, María Ballesteros- durante la última jornada del año pasado y la primera de este se atendieron a unos cuatrocientos pacientes. La cifra es muy superior a la que es habitual para los días festivos, cuando según las mismas fuentes en Urgencias se atiende a unas 60 ó 70 personas diarias. "En ningún caso se llega a las cien", apunta Ballesteros.

Los profesionales de Enfermería entienden que la mayor afluencia de pacientes a las salas de Urgencias no tiene que ver con la gripe, que todavía no ha registrado sus máximos datos. Al contrario, al caer la jornada de Año Nuevo en lunes, se han enlazado tres jornadas consecutivas en las que las consultas de Atención Primaria han estado cerradas. "Se trata sobre todo de gente mayor que, al tener algún problema con patologías ya existentes, acuden a las Urgencias del Virgen de la Concha porque tienen que pasar varios días para acudir a la consulta del médico de Atención Primaria".

Así las cosas las visitas obedecen sobre todo a "reagudizaciones" de patologías ya existentes. Los responsables de la organización de personal "han movido a enfermeras de otros servicios con camas libres para que atiendan a las personas que llegaban a Urgencias", aseguran desde el sindicato Satse.

El sindicato cree que la gerencia "debería haber contratado personal" para atender al pico de visitas a Urgencias porque, recuerdan las mismas fuentes, "todos los años sucede lo mismo en Nochevieja y Año Nuevo". Este año "no había médico de cabecera desde el viernes por la tarde" y eso ha contribuido a que "en Urgencias vivamos la misma situación de todos los años".

El sindicato asegura que muchos de los pacientes que acudieron a Urgencias durante los últimos días recibieron el alta sin necesidad de ser hospitalizados.

Satse asegura que la afluencia de pacientes registrada durante los últimos días se ha subsanado en parte al abrir un ala de Urgencias que, si bien solo está operativa hasta las diez de la noche, ha tenido que estar abierta hasta las tres de la mañana. "Se ha movido de servicio a una enfermera para ir allí. Es una forma de ahorrar, pero tendría que haberse contratado personal".