La vida diaria en una villa agrícola, la Armada Invencible o una serie de asesinatos son algunos de los ingredientes que Fernando Cartón Sancho engarza en su primera novela, "El náufrago de Castilla".

-Acaba de ver la luz su primera novela, un texto que ve la luz?

-Porque para mí la escritura siempre ha sido una válvula de escape. He escrito siempre desde niño pero tras "La Veleta nocturna", que podríamos entender como una obra menor, me planteé el reto de hacer un proyecto más grande. Escribir es una solución a una necesidad vital y por eso quise darle escape a través de esta novela.

-Ha apostado por una novela ambientada varios siglos atrás.

-Me he remontado al siglo XVI, a la época de la Armada Invencible y los últimos años del reinado de Felipe II. Para mí es una época fascinante porque es el período del Imperio Español que, aunque se ha criticado mucho y existe una leyenda negra que circula por Europa, he intentado desmitificar creando unos personajes que son personas sencillas. El siglo XVI es un momento fascinante que no está lo suficientemente valorado y estudiado por los historiadores y por los propios españoles, lo cual es una pena. He querido dar énfasis a las luces de esa época porque los españoles somos muy críticos y olvidamos los momentos de esplendor.

-Optar por este período ha conllevado un trabajo de documentación.

-Muy intenso porque para que una novela histórica sea creíble tiene que estar muy bien documentada. He leído bastantes libros de ese momento sacados de la Biblioteca Nacional y además he viajado a los lugares porque creo que hay que ver, oler y percibir aquel espacio que describes. Como la novela está ambientada en Villalpando y también en Lisboa, Coruña e Irlanda, viajé a esos lugares y me hice la misma ruta que se hicieron los protagonistas masculinos.

-El grueso de la novela transcurre en Villalpando. ¿Por qué?

-Porque en aquella época era una villa de mucho abolengo, de hidalgos y todavía estaba amurallada. Es un pueblo que conozco muy bien sus rincones y su historia. Era un marco idóneo y es un pequeño homenaje a mi pueblo.

-Algunos de los personajes tienen apellidos que todavía se usan en esta población.

-Hay algún que otro guiño, pero apellidos como Allende todavía existen en toda la provincia. Algún personaje es real o algunas de sus cualidades están reflejadas, pero son pequeños guiños pues la mayoría de personajes son inventados, salvo los históricos como Juan Fernández de Velasco, condestable de Castilla en aquella época y señor de Villalpando; el rey Felipe II y el propio Bernardino de Escalante, a quienes he intentado caracterizar como sus bibliógrafos dicen que eran.

-También incluye a Lope de Vega entre esos personajes reales.

-Lope de Vega, además de ser un gran escritor, fue un excelente soldado. Su carácter bravucón y mujeriego me daba mucho juego y además participa en la expedición de la Armada Invencible, donde también están mis protagonistas. Es secundario pero tiene su importancia en algún momento de la trama.

-Usted aúna novela histórica, con novela negra y amorosa en un mismo volumen.

-Son tres ríos que abocan al mismo océano. Además, la estructura de la novela está planteada en un capítulo dedicado a él y otro a ella, lo que facilita que el lector pueda asimilar estas vertientes. De hecho, la novela podría leerse a partir de sexto capítulo del primer libro por capítulos pares y luego por capítulos impares.

-¿La escritura tuvo lugar de manera independiente?

-No, fue lineal tal y como se ha publicado. Además, me he esforzado mucho en el empleo del vocabulario quizá porque soy una amante de las lecturas del desaparecido Miguel Delibes.

-El personaje de Paco pasa de un pícaro a un hombre perverso.

-El Paco comenzó siendo un pícaro típico de aquella época y va ganando en maldad hasta convertirse en un sádico porque tiene claro que no va volver a pasar hambre. Su crecimiento no lo tenía claro cuando comencé a escribir, pero fue ganando vida conforme la trama avanzaba. Personalmente creo que es el personaje que más conseguido está.

-Concluye la novela de una manera abierta. ¿Habrá una segunda parte?

-He dejado colgados a algunos personajes como Gabino Allende, que quedó en Irlanda, y hay algunos hechos históricos que acaecieron poco después de que concluye mi novela, pues en 1602 el propio condestable de Castilla, Juan Fernández de Velasco, es mandado por Felipe III como embajador a Inglaterra a firmar la paz que habían pedido los ingleses. Me tienta mucho un nuevo viaje de Alonso Gómez con su amo. Me gustaría hacer una segunda parte, pero tengo ya empezada otra historia que comienza en San Petersburgo, una ciudad que conozco y me seduce esa trama que no sé dónde concluirá.

-"El náufrago de Castilla" la prologa otro escritor vinculado a Villalpando, Félix G. Modroño.

-Es alguien que me ha apoyado constantemente y ha creído en mí quizá más que yo mismo e incluso, por su experiencia, me ha ayudado en el trámite de ponerme en contacto con editoriales.

-Y una firma relevante ha apostado por publicarle.

-Es ver cumplido un sueño porque siempre quise que uno de mis trabajos viera la luz. Es muy triste para una persona que escribe que un relato acabe en un cajón, ahora en el fondo de un disco duro. Cuando ves que tu historia, que los personajes que has creado suscitan comentarios entre quienes están leyendo la novela supone una satisfacción. Eso es un pequeño momento de gloria donde quizá pasa desapercibido los años que yo he pasado investigando, escribiendo, corrigiendo? las noches de desvelos. Esta novela ha tenido una preparación de años, aunque ha habido momentos de impasse para coger distancia de la historia y volver a enfrentarte con ella para ver errores y aciertos.

-¿Ha sido autocrítico?

-Sí, y lo sigo siendo. Todavía la abro y creo que tenía que haber usado algún otro tiempo verbal, que me sobran comas... (risas).

-Su libro ¿qué vida va a tener?

-Por el momento lo hemos presentado en Valladolid y en la biblioteca del Colegio de Abogados de Zamora. Además, el club de lectura de Villalpando ya tiene una serie de sesiones para efectuar una lectura pública de la novela. También tengo pensado organizar firma de libros en Benavente o bien en Medina de Rioseco, en aquellos lugares que de alguna manera aparezcan y estén retratados en la novela.