La oposición en el Ayuntamiento de Zamora ha dado un golpe sobre la mesa y ha decidido tumbar el proyecto del Presupuesto para 2018 elaborado por el bipartito formado entre Izquierda Unida y el Partido Socialista. Con trece votos negativos y tan solo doce a favor, el documento no ha conseguido superar el necesario examen del Pleno y deberá ser nuevamente debatido en un plazo máximo de dos meses. Un tiempo en el que el equipo de Gobierno deberá buscar ese apoyo que le falta, aunque la situación no ha empezado de manera amistosa. De hecho, Francisco Guarido, al término de la sesión, ha asegurado que no se va a modificar el Presupuesto ideado y ha dejado la puerta abierta a la presentación de una moción de confianza e incluso de censura, si así lo plantea alguno de los grupos.